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domingo, 8 de mayo de 2016

NUESTRA SEÑORA DEL ROSARIO DE POMPEYA, ADVOCACIÓN MARIANA, 8 DE MAYO


Nuestra Señora del Rosario de Pompeya
Advocación Mariana, 8 de mayo


Por: . | Fuente: Corazones.org 




En el año 79 ocurrió la famosa erupción del Volcán Vesubio que sepultó a la pagana ciudad de Pompeya (Sur de Italia). Allí la aristocracia Romana gustaba pasar tiempo de recreo y fue sorprendida por la súbita destrucción.

A comienzos del siglo XIX se instalaron en la cercanía familias de campesinos que erigieron una humilde capilla. En 1872 llegó el abogado Bartolo Longo (beatificado el 26 de octubre de 1980), quien trabajaba para la Condesa Fusco, dueña de ésas tierras. Longo descubrió que, después de la muerte del sacerdote, ya no habían misas en la capilla y pocos seguían firmes en la fe. 

Salva a esta gente Bartolo. Propaga el Rosario
Una noche Longo vio en sueños a un amigo muerto años atrás que le dijo "Salva a esta gente, Bartolo. Propaga el Rosario. Haz que lo recen. María prometió la salvación para quienes lo hagan". Longo trajo de Nápoles muchos Rosarios para repartir. 

Bartolo también animó a varios vecinos para que le ayuden a reparar la capilla. La gente comenzó a venir a rezar allí el rosario, cada vez en mayor número. 

En 1878, Longo obtuvo de un convento de Nápoles un cuadro de Nuestra Señora entregando el Santo Rosario a Santo Domingo y Santa Rosa de Lima. Estaba deteriorado así que un pintor lo restauró. Este cambió la figura de la Santa Rosa por la de Santa Catalina de Siena. Puesta sobre el altar del Templo, aún inconclusa, la Sagrada imagen comenzó a obrar milagros. 

El 8 de mayo de 1887, el Cardenal Mónaco de la Valleta colocó a la venerada imagen una diadema de brillantes bendecida por el Papa León XIII y el 8 de mayo de 1891, se llevó a cabo la Solemne Consagración del nuevo Santuario de Pompeya, que existe actualmente

MAYO, MES DE MARÍA, DÍA 8 - SANTA MADRE DE DIOS


MAYO, MES DE MARÍA
Octavo día: Explicación de las letanías


Sancta dei genitrix

Santa Madre de Dios. Solo a María, como Madre de Dios, puede aplicarse las palabras del Eclesiástico. Aquél que me creó descansó en mi tabernáculo. Ahora bien, por manera en que se cumplió este misterio, no hay nada más maravilloso; porque de la misma manera en que Dios Engendró a su Hijo desde toda la eternidad, sin madre, igualmente, María concibió y trajo al mundo al Hijo de Dios sin padre; y de la misma manera que Dios, con una sola palabra, sacó al universo de la nada, de la misma manera, María cuando dijo al Arcángel “Hágase en mí según tu palabra”, concibió en ese mismo instante por obra del Espíritu Santo, y el Verbo divino de hizo carne.

Sancta Virgo Virginum

Santa Virgen de las vírgenes. De todos los piadosos motivos que nos mueven a llamar a María la Virgen de las vírgenes, no hay uno más grande que el voto generoso mediante el cual consagró su virginidad a Dios; porque ella lo hizo en un tiempo en que no existía precepto, ni ejemplo ni consejo; en el tiempo mismo en que la virginidad era menos estimada que la esterilidad y era despreciada, vista por los judíos como una maldición de Dios. Por otro lado, considerando que la belleza de María nunca fue ocasión del más mínimo pecado, no inspira, por el contrario sino respeto y piedad a quienes tuvieron la felicidad de verla. Hay que convenir que Dios se complació creando a María, como un objeto que había elegido para ser la Madre de su Hijo y para ser la más pura y la más perfecta de las hijas de la tierra.

Ejemplo

El piadoso Vicente de Beauvais relata: “Había en una de nuestra ciudades, un pintor de cierto renombre que destacaba, especialmente, en reproducir la dulce y pura fisonomía de la Virgen. Le causaba placer, sin duda por el contraste, poner a sus pies a su eterno rival, pero lo dibujaba abatido, desesperad o bajo formas tan horrendas, que Satanás le guardaba rencor. Si debemos creer en la leyenda, llego hasta a amenazar a nuestro artista, diciéndole que se arrepentiría. Éste, no era hombre de dejarse intimidar. Un día que subió a un alto andamiaje, volvió a trazar sobre el frontispicio de una iglesia su retrato privilegiado, para Mostar al enemigo de la virgen cuánto lo despreciaba. Después de haber trazado un admirable esbozo de aquél, hizo de su enemigo un boceto más horrible que nunca. Mezclaba los colores cuando sintió que el andamiaje se quebraba; comprendió de inmediato lo que quería el enemigo, y tiende la mano hacia la imagen que acababa de dibujar. Ésta le tiende la suya y mientras que las planchas y las vigas colapsaban con estruendo bajo sus pies, permaneció suspendido sin otro sostén. Toda la ciudad fue testigo del prodigio. Se reconstruyó el andamiaje, y nuestro pintor, volvió a poner manos a la obra, haciéndolo con tanta propiedad esta vez, que quitó por siempre a Satanás las ganas de interrumpir su trabajo.

Roguemos a la Virgen en momentos de peligros


Traducido del francés por José Gálvez Krüger para ACI Prensa

ESTE FUE EL SALUDO DEL PAPA FRANCISCO POR EL DÍA DE LA MADRE


Este fue el saludo del Papa Francisco por el Día de la Madre



(ACI).- Desde el balcón del estudio del Palacio Pontificio del Vaticano, después de presidir el Regina Coeli, el Papa Francisco tuvo un recuerdo muy especial hacia las madres de todo el mundo en ocasión del Día de la Madre que se celebra en muchos países.

"Hoy en muchos países se celebra la fiesta de la madre. Recordamos con gratitud y afecto a todas las madres, -aquellas que están hoy en la Plaza, nuestras madres, aquellas que están con nosotros y aquellas que ya han ido al cielo- confiándolas a María, la madre de Jesús. Y juntos, para todas las madres, recemos el Ave María…”, pidió  Francisco a los miles de fieles que abarrotaban la Plaza de San Pedro.

DÍA DE LA MADRE: UNA ORACIÓN PARA LAS MAMÁS QUE PARTIERON AL CIELO


Día de la madre: una oración para las mamás
 que partieron al cielo



 (ACI).- Muchos países del mundo celebran hoy, segundo domingo de mayo, el día de la madre; sin embargo, son muchos quienes ya no la tienen a su lado, pues ya partieron a la Casa del Padre. Para ellas, las mamás que se encuentran en el cielo gozando de la Gloria de Dios, les compartimos la siguiente oración:


Continuamente te rezamos, Señor, por nuestra madre.
La recordamos con paz y con amor ante Ti,
seguros de que ella vive,
como estamos seguros de que vives Tú
y de que tu amor dura para siempre.
La recordamos cuando estaba entre nosotros...
A veces, nos parece sentir el calor y el sosiego
de su presencia protectora
como cuando vivía aquí,
mucho más para nosotros que para sí misma.
Dale, Señor, tu amor, dale tu vida. Dale tu paz.
Tenla muy cerca de Ti.
Sea feliz y ruegue ante Ti por nosotros.
Ayúdanos a vivir lo que ella nos enseño,
más con amor que con palabras.
A rezarte como ella, a quererte como ella,
a hacer de Ti y de los demás, igual que ella,
el sentido de nuestra vida.
Y si por descuido o por debilidad en algo te faltó,
perdónala, Tú que sabes lo que es ser Padre y Madre
y conoces como nadie el amor y el perdón
sin medida ni límites...
Perdónale sus faltas por lo mucho que amó a todos.
Gracias, Señor, por esta oración que nos llena de paz
en el recuerdo de nuestra madre.
Amén.