jueves, 4 de junio de 2020

NOVENA EN HONOR A SAN ANTONIO DE PADUA: 4 AL 12 DE JUNIO


Novena a San Antonio de Padua, "el santo de todo el mundo"
Por Abel Camasca


 (ACI).- Cercanos a la fiesta de San Antonio de Padua que se celebra cada 13 de junio, ACI Prensa ofrece una novena de preparación en honor a este gran doctor de la Iglesia, patrono de las mujeres estériles, y a quien por tradición se le invoca para pedir un buen esposo o esposa.

San Antonio nació en Portugal en 1195 y se le conoce con el apelativo de Padua porque en esa ciudad italiana fue donde murió (1231) y se veneran sus reliquias. Se dice que cierto día, mientras oraba, se le apareció el niño Jesús.

San Buenaventura decía: "Acude con confianza a Antonio, que hace milagros, y él te conseguirá lo que buscas". León XIII lo llamó "el santo de todo el mundo" porque su imagen y devoción se encuentran por todas partes.




Primer día de la Novena a San Antonio de Padua

V/. En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.

R/. Amén.


V/. Dios mío, ven en mi auxilio.

R/. Señor, date prisa en socorrerme.

V/. Gloria al Padre...

R/. Como era en el principio...

Oración inicial

Señor Dios de poder y misericordia, te pedimos que nos envíes tu Espíritu Santo, para que, haciendo morada en nosotros, como la hizo en tu siervo Antonio, nos convierta por su intercesión en templos de tu gloria y nos guíe por los caminos que Tú, Padre de bondad, quieres para nosotros. Te lo pedimos por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

De los sermones de San Antonio

El que está lleno del Espíritu Santo habla diversas lenguas. Estas diversas lenguas son los diversos testimonios que da de Cristo, como por ejemplo la humildad, la pobreza, la paciencia y la obediencia, que son las palabras con que hablamos cuando los demás pueden verlas reflejadas en nuestra conducta. La palabra tiene fuerza cuando va acompañada de las obras, y, por esto, el Señor nos maldice como maldijo aquella higuera en la que no halló fruto, sino hojas tan sólo. “La norma del predicador -dice san Gregorio- es poner por obra lo que predica”. En vano se esfuerza en propagar la doctrina cristiana el que la contradice con sus obras.

Hablemos, por tanto, como el Espíritu Santo nos conceda expresarnos, pidiéndole humilde y devotamente que nos infunda su gracia, para que llegue el día de Pentecostés por la perfección de los cinco sentidos y la observancia del Decálogo; para que quedemos llenos del espíritu impetuoso de la contrición y nos abrasemos con las lenguas de fuego de la confesión, para que, encendidos e iluminados en el esplendor de los santos, merezcamos ver a Dios uno y trino. Ayúdenos aquel que es Dios uno y trino, bendito por los siglos de los siglos. Diga todo espíritu: Amén, aleluya.

Antífona: Desde su juventud caminó Antonio con rectitud, halló mucha sabiduría y progresó en ella. Se entregó a Dios de todo corazón y en tiempos violentos fue compasivo.

Plegaria

Recuerda, Señor, que tu misericordia y tu ternura son eternas. Con la confianza que nos da el sabernos hijos tuyos e invocando la intercesión de tu siervo San Antonio, al que atiendes con largueza, te presentamos nuestras peticiones: ...... ...... ......

Oración final

Dios todopoderoso y eterno, tú que has dado a tu pueblo en la persona de San Antonio de Padua un predicador insigne y un intercesor poderoso, concédenos seguir fielmente los principios de la vida cristiana, para que merezcamos tenerte como protector en todas las adversidades. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

V/. Bendigamos al Señor.

R/. Demos gracias a Dios.


Segundo día de la novena a San Antonio de Padua


V. En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
R. Amén.

V. Dios mío, ven en mi auxilio.
R. Señor, date prisa en socorrerme.

V. Gloria al Padre...
R. Como era en el principio...

Oración inicial

Te pedimos, Señor, confiados en la intercesión de tu siervo Antonio, que tu Espíritu nos penetre con su fuerza, para que nuestro pensar te sea grato y nuestro obrar concuerde con tu voluntad. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.


De la vida de San Antonio

El 16 de enero de 1220 fueron martirizados en Marrakech los franciscanos que habían pasado por Coimbra, san Berardo y cuatro compañeros. Sus restos mortales fueron llevados por el Infante Don Pedro a Coimbra, y allí colocados en la iglesia de Santa Cruz. Las noticias del martirio y los milagros que acompañaban a las santas reliquias llevaron a Antonio a intensificar sus relaciones con los franciscanos del pequeño convento de San Antón. El deseo de evangelizar a los infieles y de sufrir el martirio por Cristo, llevó a Antonio a pasar, con los debidos permisos, a la Orden de San Francisco. Era el verano-otoño de 1220. Hecho un brevísimo noviciado, a finales de 1220 o principios de 1221 Antonio marchó a Marruecos con un compañero. Pero, cuando veía ya cercano el cumplimiento de sus anhelos, una grave enfermedad lo tuvo postrado todo el invierno, y lo obligó a regresar a su patria tan pronto como el tiempo y la navegación lo permitieran. Una vez más era la Providencia la que marcaba el camino a Antonio con hechos insospechados.

De los sermones de San Antonio

La confesión sacramental se dice también puerta del cielo. Sí. Verdaderamente es puerta del cielo, verdadera puerta del paraíso, porque por ella, como por una puerta, pasa el penitente a besar los pies de la divina misericordia, se levanta hasta besar las manos de la gracia celestial, y es acogido para recibir el ósculo de la reconciliación con el Padre. ¡Oh casa de Dios! ¡Oh puerta del cielo! ¡Oh confesión del pecado! ¡Dichoso aquel que habite en ti! ¡Dichoso el que entre por ti! ¡Feliz el que se humillare en ti! Humillaos, pues, vosotros, y entrad, hermanos carísimos, por la puerta de la confesión. Confesad, como habéis oído, los pecados y sus circunstancias. Ha llegado el tiempo aceptable para la confesión, ha llegado el día saludable para la satisfacción, conforme a lo que dice: Habiendo ayunado cuarenta días y cuarenta noches...

Cuando finalmente le tentó de avaricia, le respondió Jesús: Adorarás al Señor tu Dios, y a Él solo servirás. Todos los que aman el dinero o las glorias mundanas, se postran ante el diablo y lo adoran. Pero nosotros, por quienes Jesucristo descendió al vientre de una Virgen y se sometió al tormento de una cruz, instruidos por su ejemplo, vayamos al desierto de la penitencia y con su ayuda refrenemos el ímpetu de la gula, el viento de la vanagloria, el incendio de la avaricia. Adoremos a Aquel a quien los ángeles sirven. Él es bendito, glorioso, laudable y excelso por los siglos de los siglos. Y toda criatura responda: Amén.

Antífona: El Señor enderezó sus pasos, y prolongó su vereda en la paz. Le mostró el camino de la sabiduría, su senda brilla como la aurora y se va esclareciendo hasta que es de día.

De los milagros de San Antonio

Una monja de Santa Clara, llamada Oliva, cuando aún estaba insepulto el cuerpo del santo, se llegó a besarle las manos. Mientras permanecía postrada ante su cuerpo, pidió a Dios que, por los méritos del bienaventurado padre Antonio, le infligiera en la presente vida toda la pena que por sus pecados hubiera merecido. Acabada su oración, volvió a entrar al monasterio, siendo enseguida atacado todo su cuerpo de un dolor tan violento, que no sólo le fue imposible dominarse a sí misma, sino que sobresaltó a las otras monjas con sus gritos. Cuando al día siguiente entraban las otras en el refectorio, entró también ella a hurtadillas; pero, recreciéndole poco a poco el mal, no pudo probar bocado, sino que, mientras sus hermanas comían, se revolvía a uno y otro lado. Fue llevada a la enfermería por orden de la abadesa y, con redobladas súplicas, imploraba remedio. Se acordó entonces de que tenía guardada una partecilla de la túnica del bienaventurado Antonio y, tras hacérsela traer, se la aplicó. Inmediatamente cesó todo dolor.

Plegaria

Recuerda, Señor, que tu misericordia y tu ternura son eternas. Con la confianza que nos da el sabernos hijos tuyos e invocando la intercesión de tu siervo san Antonio, al que atiendes con largueza, te presentamos nuestras peticiones: ...... ...... ......

Oración final

Dios todopoderoso y eterno, tú que has dado a tu pueblo en la persona de san Antonio de Padua un predicador insigne y un intercesor poderoso, concédenos seguir fielmente los principios de la vida cristiana, para que merezcamos tenerte como protector en todas las adversidades. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

V. Bendigamos al Señor.
R. Demos gracias a Dios.





Tercer día de la novena a San Antonio de Padua

V. En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
R. Amén.

V. Dios mío, ven en mi auxilio.
R. Señor, date prisa en socorrerme.

V. Gloria al Padre...
R. Como era en el principio...

Oración inicial

Padre lleno de amor, concédenos por intercesión de san Antonio que, siguiendo su ejemplo, nos dediquemos con amor al servicio de la Iglesia y de los hombres nuestros hermanos. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

De la vida de San Antonio

La nave en que regresaba Antonio a Portugal, fue arrastrada por la violencia de los vientos a las costas de Sicilia. Desembarcó el Santo y llegó a Mesina, donde los frailes que lo acogieron le informaron que se iba a celebrar pronto un capítulo general en Asís, al que podían asistir todos los hermanos de la Orden. Antonio se unió a ellos y, del 30 de mayo al 8 de junio de 1221, estuvo en el capítulo presidido por san Francisco. Terminado el capítulo, cada cual regresó a su provincia o marchó a la misión que se le había confiado. Antonio era un desconocido, recién incorporado a la Orden en tierras lejanas, y no tenía un destino establecido, por lo que el provincial de Romaña lo admitió en su provincia y lo destinó al eremitorio de Monte Paolo, cerca de Forlí, en el que no había ningún sacerdote. Durante unos quince meses, allí pudo el santo madurar su vocación franciscana, sacar conclusiones de su experiencia misionera, sumergirse en la contemplación y en la vida ascética. Hasta que un hecho, en apariencia fortuito, iba a cambiar el rumbo de su vida.

De los sermones de San Antonio

¡Oh inestimable dignidad de María! ¡Oh inenarrable sublimidad de la gracia! ¡Oh inescrutable profundidad de misericordia! ¿Qué gracia, qué misericordia fue o pudo jamás ser hecha a un ángel o a un hombre, tan grande como la que fue hecha a la bienaventurada Virgen María, que Dios Padre quiso que fuera Madre de su propio Hijo, igual a Él, engendrado antes de los siglos? Sería gracia y dignidad máxima que una pobrecita mujer tuviese un hijo con el emperador. En realidad, superior a toda gracia fue la gracia de María Santísima, que tuvo un Hijo con Dios Padre, por lo cual, mereció ser coronada en el cielo.

Te rogamos, pues, Señora nuestra, ínclita Madre de Dios, ensalzada por encima de los ángeles, que llenes con la gracia celestial el vaso de nuestro corazón; que lo hagas resplandecer con el oro de la sabiduría; que lo fortalezcas con el poder de tu virtud; que lo adornes con las piedras preciosas de las virtudes; que derrames sobre nosotros el óleo de tu misericordia, tú, olivo bendito, para que cubras la multitud de nuestros pecados, a fin de que merezcamos ser levantados a la altura de la gloria celestial y ser bienaventurados con los bienaventurados. Ayúdenos Jesucristo, tu Hijo, que te exaltó por encima de los coros de los ángeles, te puso la corona de Reina y te sentó en el trono de la luz eterna. A Él es dada honra y gloria por los siglos de los siglos. Diga toda la Iglesia: Amén, Aleluya.

Antífona: El Espíritu del Señor está sobre mí, porque el Señor me ha ungido. Me ha enviado para dar la buena noticia a los que sufren, para proclamar la amnistía a los cautivos, y a los prisioneros la libertad, para proclamar el año de gracia del Señor.

De los milagros de San Antonio

Un clérigo de Anguilara, llamado Guidoto, cierto día que estaba en la cámara del señor obispo de Padua, se mofaba a escondidas de los testigos que deponían acerca de los milagros del bienaventurado Antonio. Pero a la noche siguiente fue acometido de dolores tan violentos por todo el cuerpo, que creyó que irremisiblemente le aguardaba la sentencia de muerte. Estimándose, y con razón, indigno de conmiseración, pedía a su madre que, apoyada en su confianza, hiciera un voto al santo de Dios, para poder alcanzar así misericordia. Apenas hecho el voto desaparecieron los dolores, y antes de que llegara el día ya estaba sano; y el que antes había hecho escarnio de los testigos con la risilla de la incredulidad, viose obligado ahora a rendir testimonio ante la verdad.

Plegaria

Recuerda, Señor, que tu misericordia y tu ternura son eternas. Con la confianza que nos da el sabernos hijos tuyos e invocando la intercesión de tu siervo san Antonio, al que atiendes con largueza, te presentamos nuestras peticiones: ...... ...... ......

Oración final

Dios todopoderoso y eterno, tú que has dado a tu pueblo en la persona de san Antonio de Padua un predicador insigne y un intercesor poderoso, concédenos seguir fielmente los principios de la vida cristiana, para que merezcamos tenerte como protector en todas las adversidades. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

V. Bendigamos al Señor.
R. Demos gracias a Dios.



Cuarto día de la novena a San Antonio de Padua


V. En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
R. Amén.

V. Dios mío, ven en mi auxilio.
R. Señor, date prisa en socorrerme.

V. Gloria al Padre...
R. Como era en el principio...

Oración inicial

Te pedimos, Dios Padre todopoderoso, por intercesión de tu amigo san Antonio, que derrames sobre nosotros la fuerza del Espíritu Santo, para que, como él, podamos cumplir fielmente tu voluntad y demos testimonio de ti con nuestras obras. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

De la vida de San Antonio

El 24 de septiembre de 1222, acudieron a Forlí multitud de frailes, entre ellos Antonio, con motivo de la administración de órdenes sagradas. Era costumbre que antes de tal celebración se dirigiera una exhortación a los ordenandos. Pero resultó que ninguno de los presentes, ni siquiera los dominicos, se encontraba dispuesto para ello. En tal situación el superior franciscano ordenó a Antonio que dijera dos palabras de edificación, y el santo, sin pretenderlo, puso de manifiesto su gran cultura bíblico-teológica, así como su profunda espiritualidad, para asombro y alegría de los asistentes. Se enteró de lo sucedido el Provincial, que de inmediato confirió a Antonio el oficio de la predicación. A partir de octubre de 1222, Antonio se consagró a la predicación, recorriendo pueblos y ciudades, dirigiendo la palabra a sus propios hermanos de hábito, a grupos de estudiantes, a confraternidades, a entidades canonicales o monásticas, e incluso a la curia pontificia. A su predicación moral y penitencial, asoció la acción pacificadora, la enseñanza de la S. Escritura a sus hermanos, el enfrentamiento con los herejes, etc.

De los sermones de San Antonio

Refúgiate en la Virgen María, oh pecador, porque es ella la ciudad de refugio. En efecto, como se dice en el libro de los Números, en otro tiempo el Señor mandó: Elegiréis ciudades que sean para vosotros ciudades de refugio, donde pueda refugiarse el homicida que hubiere muerto a alguno sin querer. Así ahora la misericordia del Señor ha puesto como refugio de misericordia el nombre de María hasta para los homicidas voluntarios. Torre fortísima es el nombre de la Señora. En ella se refugiará el pecador y se salvará. Nombre dulce, nombre que conforta al pecador, nombre de dichosa esperanza. Señora, tu nombre está en el deseo de mi alma. El nombre de la Virgen era María, dice san Lucas. Es tu nombre perfume que se difunde. El nombre de María es júbilo en el corazón, miel en la boca, melodía en el oído. Noblemente, pues, en alabanza de la Virgen Santísima se dice: Dichoso el vientre que te llevó y los pechos que mamaste.

Por eso, te pedimos, Señora nuestra, esperanza nuestra, que Tú, Estrella del mar, irradies luz a nosotros, sacudidos por la tempestad de este mar, nos encamines al puerto, y protejas nuestra muerte con la tutela de tu presencia, a fin de que merezcamos salir seguros de la cárcel y lleguemos alegres al gozo interminable. Ayúdenos Aquel a quien llevaste en tu vientre bendito y amamantaste en tus pechos sacratísimos. A Él sea dada honra y gloria por los siglos de los siglos. Amén.

Antífona: El Señor puso a Antonio como lumbrera y lo exaltó en medio de su pueblo. La lengua del justo es plata probada. Sus labios apacientan a muchos.

De los milagros de San Antonio

Un hombre de Porcilia (barriada de Padua), Escoto por nombre, que tenía los pies empodrecidos y tumefactos a causa de una podagra nudosa, acudió, llevado por un hombre a sus espaldas, al convento de los frailes. Tras confesarse y recibir la penitencia, sin pérdida de tiempo se hizo llevar, devoto, ante el arca de san Antonio. Habiendo permanecido allí brevemente, al momento retornó ya sano tan velozmente al fraile confesor, que éste, en extremo admirado por la brevedad del tiempo transcurrido, hizo que el que había curado se paseara por el claustro. Finalmente, ante los ojos de todos, el que llegó transportado a las espaldas, se fue por su propio pie, dando gracias a Dios y al bienaventurado Antonio.

Plegaria

Recuerda, Señor, que tu misericordia y tu ternura son eternas. Con la confianza que nos da el sabernos hijos tuyos e invocando la intercesión de tu siervo san Antonio, al que atiendes con largueza, te presentamos nuestras peticiones: ...... ...... ......

Oración final

Dios todopoderoso y eterno, tú que has dado a tu pueblo en la persona de san Antonio de Padua un predicador insigne y un intercesor poderoso, concédenos seguir fielmente los principios de la vida cristiana, para que merezcamos tenerte como protector en todas las adversidades. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

V. Bendigamos al Señor.
R. Demos gracias a Dios.



Quinto día de la novena a San Antonio de Padua


V. En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
R. Amén.

V. Dios mío, ven en mi auxilio.
R. Señor, date prisa en socorrerme.

V. Gloria al Padre...
R. Como era en el principio...

Oración inicial

Señor, tú que hiciste crecer a la Iglesia mediante el celo y los trabajos apostólicos de san Antonio, haz que, por su intercesión, recibamos siempre nuevos estímulos para crecer en la fe y en las buenas obras. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

De la vida de San Antonio

Además de predicador, san Antonio fue el primer "lector" o maestro de teología de la Orden, que comenzó su docencia en Bolonia, entre 1223 y 1224, con la aprobación expresa de san Francisco. Luego, desde el otoño de 1224 hasta finales de 1227, estuvo en el sur de Francia, dedicado a una multiforme actividad apostólica: la labor contra los herejes albigenses y los daños que habían causado en el pueblo, la enseñanza como maestro de teología en Montpellier, ciudadela de la ortodoxia católica, donde se formaban los dominicos y los franciscanos para predicar a los albigenses de la región. En el capítulo celebrado en Arlés, mientras Antonio predicaba, san Francisco, que aún vivía, se apareció estigmatizado. Por el año 1225, Antonio estuvo predicando en Toulouse, fortaleza de los albigenses, y, como maestro de teología, enseñando a sus hermanos de hábito. Según una tradición, aquí sucedió el famoso milagro del mulo, que se arrodilló ante la Eucaristía. Sin dejar de predicar y enseñar, ejerció también cargos de autoridad.

De los sermones de San Antonio

Le pusieron por nombre Jesús. Nombre deleitable, nombre que conforta al pecador y da dichosa esperanza. Júbilo en el corazón, melodía en el oído, miel en la boca. De este nombre dice la Esposa, transportada de gozo, en el Cantar de los Cantares: Oleo derramado es tu nombre. Nota que el óleo hace cinco cosas. Sobrenada en todo líquido, ablanda las cosas duras, endulza las ásperas, ilumina las oscuras, sacia los cuerpos. Así este nombre de Jesús sobresale entre todos los nombres y ángeles, porque al nombre de Jesús doblan las rodillas todas las cosas. Si le predicas a Él, ablanda los duros corazones; si le invocas, endulza las ásperas tentaciones; si en Él piensas, ilumina el corazón; si lo lees, sacia el alma.

Nosotros, pues, que del nombre de Cristo nos llamamos cristianos, unánimemente y con devoto corazón roguemos al mismo Jesucristo, Hijo de Dios, y pidámosle insistentemente nos conceda llegar con espíritu contrito a la confesión y merezcamos recibir el perdón de nuestras iniquidades. Así renovados y purificados, merezcamos disfrutar del gozo de su santa resurrección y hallarnos en la gloria de la bienaventuranza eterna. Ayúdenos Él mismo, a quien es debida toda honra y gloria por los siglos de los siglos. Amén.

Antífona: El Señor hizo milagros en mi favor, y me escuchó cuando lo invoqué. Alabaré al Señor con mi corazón y con mis obras; daré gracias al que me enseñó.

De los milagros de San Antonio

Había en Codigoro una niña llamada Samaritana, a la que un día, habiendo ido con otras niñas al campo de su padre a coger legumbres, súbitamente se le contrajeron las rodillas. Ya no fue capaz de regresar, y fueron sus acompañantes las que la llevaron a la casa paterna. Y así, arreciando la enfermedad, desde hacía tres años caminaba arrastrándose con las manos y con las nalgas por el suelo. Cierto día, tras hacer la confesión, acudió la niña junto con su madre al sepulcro del bienaventurado Antonio para orar, y, recuperada enseguida su antigua salud, se apresuró a volver a casa por su propio pie. Llegó esto a oídos de la gente de Codigoro, que salieron al punto a su encuentro, mientras repicaban las campanas, y veneraron en ella la grandeza del Señor.

Plegaria

Recuerda, Señor, que tu misericordia y tu ternura son eternas. Con la confianza que nos da el sabernos hijos tuyos e invocando la intercesión de tu siervo san Antonio, al que atiendes con largueza, te presentamos nuestras peticiones: ...... ...... ......

Oración final

Dios todopoderoso y eterno, tú que has dado a tu pueblo en la persona de san Antonio de Padua un predicador insigne y un intercesor poderoso, concédenos seguir fielmente los principios de la vida cristiana, para que merezcamos tenerte como protector en todas las adversidades. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

V. Bendigamos al Señor.
R. Demos gracias a Dios.



Sexto día de la novena a San Antonio de Padua


V. En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
R. Amén.

V. Dios mío, ven en mi auxilio.
R. Señor, date prisa en socorrerme.

V. Gloria al Padre...
R. Como era en el principio...

Oración inicial

Concédenos, Dios todopoderoso, que al celebrar la memoria de tu siervo san Antonio, aprovechemos sus admirables enseñanzas e imitemos el ardor de su caridad. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

De la vida de San Antonio

A finales de 1227, Antonio regresó a Italia donde continuó incansable su tarea apostólica. Poco después, fue elegido ministro provincial del norte de Italia, y como tal estaba obligado a visitar, exhortar y corregir a sus frailes. Las fuentes alaban la figura de Antonio como servidor y ministro de sus hermanos, subrayando su ejemplaridad, su clemencia y benignidad, su capacidad de conmover los corazones de los tibios y negligentes, su defensa y protección del buen nombre de sus frailes, su buen humor en la convivencia, etc. Antonio dejó el oficio de ministro provincial en mayo de 1230, cuando se celebró el capítulo general en Asís con motivo del traslado de los restos mortales de san Francisco a la basílica que se le había construido. Por aquel tiempo se estableció la sincera y profunda amistad entre san Antonio y Tomás Gallo, famoso teólogo y comentador de los escritos del Pseudo-Dionisio, canónigo regular de San Agustín, abad del monasterio de San Andrés de Vercelli, en el que San Antonio moró algún tiempo; para ambos debió de resultar fructuoso el trato mutuo.

De los sermones de San Antonio

Lo entregó uno de sus discípulos: ¿Qué me queréis dar y yo os lo entregaré? ¡Horror! Por una insignificancia es vendido aquel que no tiene precio. ¡De espanto! Dios traicionado, vendido por unas monedas. ¿Qué me queréis dar? ¡Oh Judas! Te atreves a vender al Señor, al Hijo de Dios, como si fuese un vil esclavo, un perro muerto; ni siquiera pides lo que tú quisieras, sino lo que quieran darte los compradores. ¿Qué me queréis dar? ¿Qué te van a dar ellos? Si te diesen Jerusalén, Galilea o Samaría ¿podrían con eso pagar lo que vale Jesús? Si te pudiesen dar el cielo, los ángeles, la tierra y los hombres, el mar y todo cuanto contiene ¿podrían comprar al Hijo de Dios, en quien están ocultos todos los tesoros de la sabiduría y de la ciencia? Cierto que no.

Roguemos, pues, hermanos carísimos, y supliquemos humildemente a la misericordia de Jesucristo, que venga a ponerse en medio de nosotros, nos conceda la paz, nos absuelva de los pecados, quite de nuestro corazón toda duda y nos infunda la fe en su pasión y resurrección, para que con los Apóstoles y con los fieles de la Iglesia merezcamos recibir la vida eterna. Ayúdenos aquél que es bendito, laudable y glorioso por los siglos de los siglos. Que toda alma fiel diga: Amén, Aleluya.

Antífona: Por su fidelidad se acreditó de profeta, y se manifestó fiel en su predicación. Todos se maravillaron de la sabiduría de sus palabras y glorificaron a Dios.

De los milagros de San Antonio

Vivía en el castillo de Montañana una mujer, cuyo nombre era Guina, que tenía ya dos años imposibilitados el hombro y la mano derecha, de manera que no podía echarse absolutamente nada a la espalda, ni tampoco llevarse la mano a la boca. Acercóse cierto día una primera y una segunda vez al sepulcro del bienaventurado Antonio, y, como no sintiera el más mínimo alivio en el hombro ni en el brazo, se llegó al fraile que estaba ocupado en confesar. Hecha la confesión, acercóse una tercera vez al arca, y se postró en oración. Mientras oraba, viose asaltada improvisamente de un agudo dolor en el hombro, y el hueso de la espalda retornó a su lugar, crujiendo como cuando se cascan nueces. Se alzó entonces la mujer, y al punto agitó el brazo, y, a la vista de todos, volvió libre a su casa.

Plegaria

Recuerda, Señor, que tu misericordia y tu ternura son eternas. Con la confianza que nos da el sabernos hijos tuyos e invocando la intercesión de tu siervo san Antonio, al que atiendes con largueza, te presentamos nuestras peticiones: ...... ...... ......

Oración final

Dios todopoderoso y eterno, tú que has dado a tu pueblo en la persona de san Antonio de Padua un predicador insigne y un intercesor poderoso, concédenos seguir fielmente los principios de la vida cristiana, para que merezcamos tenerte como protector en todas las adversidades. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

V. Bendigamos al Señor.
R. Demos gracias a Dios.





Séptimo día de la novena a San Antonio de Padua


V. En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
R. Amén.

V. Dios mío, ven en mi auxilio.
R. Señor, date prisa en socorrerme.

V. Gloria al Padre...
R. Como era en el principio...

Oración inicial

Dios todopoderoso, que le has dado un doctor a tu Iglesia en la figura de san Antonio, haz que todo cuanto él enseñó bajo el magisterio del Espíritu, arraigue para siempre en nuestros corazones; y el que, por gracia tuya, es nuestro protector, sea también nuestro abogado y atraiga sobre nosotros tu misericordia. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

De la vida de San Antonio

De junio de 1229 a junio de 1230, la Iglesia promovió una gran misión pacificadora en la región véneta, atormentada por los crueles enfrentamientos entre facciones de la nobleza. Antonio participó en esa misión, armonizando el cuidado de los frailes con los viajes de evangelizador y pacificador. Estuvo repetidas veces Padua, donde fijó su residencia y se dedicó intensamente a predicar, a oír confesiones, y también a enseñar teología a sus frailes en la escuela que fundó en la ciudad; más aún, tuvo coloquios y conferencias de temas bíblico-morales en los ambientes universitarios paduanos, que le profesaron una gran veneración. El capítulo general de 1230 envió a Roma a un grupo selecto de hermanos, entre ellos Antonio, con el encargo de exponerle al Papa los problemas urgentes de la Orden. La estancia en la curia pontificia se prolongó algunos meses, en los que Antonio continuó predicando y dando conferencias espirituales. El Papa, en la bula de canonización de Antonio, recuerda su trato personal con él, su virtud y su ciencia, y lo llama "Arca del Testamento" por sus profundos conocimientos bíblicos.

De los sermones de San Antonio

Lo entregó Judas, uno de sus discípulos. ¿Puede acaso el Creador ser comprado o vendido por una criatura? Y tú dices: ¿Qué me queréis dar y os lo entregaré? Dime ¿en qué te perjudicó y qué mal te hizo, pues dices: os lo entregaré? ¿Te olvidaste de aquella incomparable humildad del Hijo de Dios y de su pobreza voluntaria? ¿Su bondad y afabilidad? ¿Su dulce predicación y prodigiosos milagros? ¿Aquellas tiernísimas lágrimas derramadas sobre la ciudad de Jerusalén y la muerte de Lázaro? ¿Y el privilegio de haberte escogido para ser Apóstol haciéndote su familiar y amigo? Éstas y otras cosas semejantes tendrían que ablandarte el corazón e inducirte a piedad para no decir: Y os lo entregaré. ¡Oh, cuántos son hoy los Judas Iscariotes que traicionan la verdad por obtener cualquier ventaja temporal! ¡Traicionan al prójimo con el beso de la adulación y terminan ahorcándose con el lazo de la condenación eterna!

Te rogamos, Señora nuestra, Madre de Jesús, que tú, Estrella de la mañana, alejes con tu esplendor la niebla de la sugestión diabólica que cubre la tierra de nuestra alma; tú que eres la luna llena, llena nuestro vacío, ahuyenta las tinieblas de nuestros pecados, a fin de que merezcamos llegar a la plenitud de la vida eterna, a la luz de la gloria imperecedera. Ayúdenos el Señor, que te creó para que seas nuestra luz. A Él sea dada la honra y gloria por los siglos de los siglos. Amén.

Antífona: El justo germinará como una azucena, y florecerá eternamente ante el Señor. Será alabado ante la muchedumbre de los elegidos. Porque el Señor ha honrado a su siervo y por su medio has obrado maravillas. Su nombre será glorificado.

De los milagros de San Antonio

Un caballero de Salvaterra, Aleardino por nombre, que desde su mocedad había sido seducido por la herejía, fue un día a Padua, y, mientras estaba sentado a la mesa, razonaba con los otros comensales sobre los milagros otorgados a los fieles devotos por los méritos del bienaventurado Antonio. Como todos sostenían que el bienaventurado Antonio era un santo de Dios, vació el vaso que tenía entre las manos y prorrumpió más o menos así: «Si aquel a quien vosotros llamáis santo preservare intacto este vaso, tendré por verdadero aquello de que intentáis persuadirme». Desde lo alto donde estaban comiendo, arrojó el vaso contra el suelo, y, cosa admirable, resistió el vidrio el choque contra la piedra y quedó incólume. Arrastrado a penitencia a la vista del milagro, precipitóse solícito el hidalgo a recoger el vaso intacto, y, llevándolo consigo, contó a los frailes cómo había sucedido todo. Y hecha la confesión, aceptó con unción la penitencia que por sus pecados se le impuso, adhirióse a Cristo con fidelidad, y convirtióse en incansable predicador de sus maravillas.


Plegaria

Recuerda, Señor, que tu misericordia y tu ternura son eternas. Con la confianza que nos da el sabernos hijos tuyos e invocando la intercesión de tu siervo san Antonio, al que atiendes con largueza, te presentamos nuestras peticiones: ...... ...... ......

Oración final

Dios todopoderoso y eterno, tú que has dado a tu pueblo en la persona de san Antonio de Padua un predicador insigne y un intercesor poderoso, concédenos seguir fielmente los principios de la vida cristiana, para que merezcamos tenerte como protector en todas las adversidades. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

V. Bendigamos al Señor.
R. Demos gracias a Dios.




Octavo día de la novena a San Antonio de Padua



V. En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
R. Amén.

V. Dios mío, ven en mi auxilio.
R. Señor, date prisa en socorrerme.

V. Gloria al Padre...
R. Como era en el principio...

Oración inicial

Señor y Dios nuestro, que por tu amor hacia los hombres has querido que san Antonio anunciara al pueblo la riqueza insondable que es Cristo; concédenos, por su intercesión, crecer en el conocimiento de tu misterio y vivir siempre según el Evangelio, dando fruto abundante de buenas obras. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

De la vida de San Antonio

En el otoño de 1230, cumplida la misión que la Orden le había encomendado ante la curia papal, Antonio regresó a Padua donde, libre de la responsabilidad de cuidar de sus hermanos, se dedicó plenamente a la predicación itinerante y a la preparación de sus sermones escritos. Accediendo a los ruegos del Card. Reinaldo de Segni, futuro papa Alejandro IV, Antonio, que en el invierno anterior había escrito sus Sermones dominicales, consagró el de 1230-31 a la redacción de sus Sermones festivi, pero, al acercarse la cuaresma, interrumpió este trabajo para dedicarse a la predicación. Del 5 de febrero al 23 de marzo de 1231, predicó la cuaresma en Padua, con un largo sermón diario, con catequesis y horas de oír confesiones. Tan admirable misión cuaresmal agotó las fuerzas del santo y minó su salud, pero produjo muy abundantes frutos evangélicos. El 17 de marzo de 1231, lunes santo, Antonio se presentó al podestà de Padua y a su Consejo para pedirles que se atenuaran las penas de los estatutos comunales para los pobres endeudados que no podían pagar, y lo consiguió.

De los sermones de San Antonio

¡Oh mansedumbre de la piedad divina, paciencia de la benignidad del Padre, profundo e insondable misterio de los designios eternos! Veías, Padre, que a tu Unigénito, igual a ti, le ataban a la columna como a un bandido y le azotaban como a un homicida. ¿Cómo te pudiste contener? Te damos gracias, Padre Santo, por habernos liberado de las cadenas del pecado y de los azotes del diablo por medio de las cadenas y azotes de tu querido Hijo. Pero, desgraciadamente, Poncio Pilato azota de nuevo a Jesucristo... Aún más: fue manchado con salivazos de los judíos. Dice San Mateo: Entonces se pusieron a escupirle en la cara y a abofetearle; y otros a golpearle. ¡Oh Padre, la cabeza de tu Hijo Jesús, que hace temblar a los ángeles, es golpeada con una caña; su rostro, que los ángeles desean contemplar, es manchado con salivazos, abofeteado; su barba es arrancada; le dan puñetazos, lo arrastran por los cabellos! Y tú, oh clementísimo, callas, disimulas y prefieres que Uno, tu Único, sea de tal modo escupido y abofeteado antes que toda la nación perezca. Honor y gloria a ti, porque con las escupiduras, los puñetazos y las bofetadas que recibió tu Hijo Jesús nos preparaste una triaca para expulsar el veneno de nuestra alma.

Te pedimos, Señor Jesús, que tú, el buen Pastor, nos guardes a nosotros, tus ovejas, nos defiendas del mercenario y del lobo, y nos corones en tu reino con la corona de la vida eterna. Ayúdanos tú, que eres bendito, glorioso y laudable por los siglos de los siglos. Que diga toda ovejita, toda alma fiel: Amén, Aleluya.

Antífona: Oh doctor admirable, luz de la Iglesia santa, bienaventurado Antonio, fiel cumplidor de la ley, ruega por nosotros al Hijo de Dios.

De los milagros de San Antonio

En la ciudad de Comaquio vivía un hombre llamado Domingo que, cierto día, salió de su casa para un menester, y se llevó en su compañía a un hijo pequeño, que iba caminando tras él. Cuando se habían alejado algún tanto de su casa, volvió la vista atrás y no vio aparecer a nadie. Sobrecogido, se puso a dar vueltas, buscándolo por los alrededores con ojos asombrados, hasta que finalmente encontró al pequeño ahogado en una poza. Sacó el desdichado padre al muchachuelo, lo llevó a casa y se lo entregó exánime a la madre; pero ésta, haciendo al punto un voto, lo recibió vivo por los méritos del muy bienaventurado Antonio.

Plegaria

Recuerda, Señor, que tu misericordia y tu ternura son eternas. Con la confianza que nos da el sabernos hijos tuyos e invocando la intercesión de tu siervo san Antonio, al que atiendes con largueza, te presentamos nuestras peticiones: ...... ...... ......

Oración final

Dios todopoderoso y eterno, tú que has dado a tu pueblo en la persona de san Antonio de Padua un predicador insigne y un intercesor poderoso, concédenos seguir fielmente los principios de la vida cristiana, para que merezcamos tenerte como protector en todas las adversidades. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

V. Bendigamos al Señor.
R. Demos gracias a Dios.



Noveno día de la novena a San Antonio de Padua


V. En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
R. Amén.

V. Dios mío, ven en mi auxilio.
R. Señor, date prisa en socorrerme.

V. Gloria al Padre...
R. Como era en el principio...

Oración inicial

Dios todopoderoso, te rogamos humildemente, por intercesión de san Antonio, que derrames sobre tu pueblo la abundancia de tu gracia y de tus dones para que nuestros días discurran felices en tu paz verdadera. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

De de la vida de San Antonio

En la segunda mitad de mayo de 1231, después de aquella agotadora cuaresma y de las celebraciones pascuales, Antonio se retiró al eremitorio de Camposampiero, cerca de Padua. Necesitaba descansar, cuidar su quebrantada salud y, sobre todo, sumergirse en la oración y el recogimiento espiritual para prepararse al encuentro con la hermana muerte, que sentía cercana. El 13 de junio de 1231, viernes, estando a la mesa con los frailes, sufrió un repentino colapso y, sintiéndose morir, pidió que lo llevaran a Padua. Lo trasladaron en un carro y, al acercarse a la ciudad, se desviaron hacia el hospicio anejo al monasterio de las clarisas de La Cella. Allí empeoró, se confesó, cantó a la Virgen, tuvo una visión de Cristo, recibió la unción de los enfermos... y falleció. Superada la polémica sobre el lugar de su enterramiento, el 17 de junio, martes (de ahí los "martes" de S. Antonio), sus restos mortales fueron trasladados a la ciudad, y los milagros empezaron a multiplicarse. El 30 de mayo de 1232 Gregorio IX lo canonizó solemnemente. Pío XII, en 1946, lo proclamó Doctor de la Iglesia, con el título de "Doctor Evangélico".

De los sermones de San Antonio

Con razón, pues, dijo Jesús de sí mismo: Yo rogaré al Padre por vosotros. Por eso dice san Juan en su carta: Tenemos a uno que abogue ante el Padre: a Jesucristo, el justo. Él es víctima de propiciación, es decir, de aplacamiento, por nuestros pecados. Por esta razón lo ofrecemos diariamente en el sacramento del altar a Dios Padre para que perdone nuestros pecados. Procedemos, pues, como la madre que tiene un hijo pequeñito. Cuando su marido airado le quiere golpear a ella, ella, estrechando a la criatura en sus brazos, la pone delante del airado marido diciendo: ¡Golpea a éste, azota a éste! La criatura llorando se compadece de la madre, y el padre, cuyas entrañas se han conmovido con las lágrimas del hijo a quien ama entrañablemente, perdona a su mujer gracias al hijo. De la misma manera a Dios Padre, airado con nosotros por nuestros pecados, le ofrecemos su Hijo Jesucristo por la alianza de nuestra reconciliación en el Sacramento del altar, a fin de que, si no por atención a nosotros, al menos por Jesús, su Hijo amado, aleje los castigos que justamente merecemos, y acordándose de sus lágrimas, de sus trabajos y de su Pasión, nos perdone.

Ea, pues, Señora nuestra, santa Madre de Dios, única esperanza, te suplicamos que ilumines con el esplendor de tu gracia nuestras almas, que las purifiques con el candor de tu pureza, que las enciendas con el calor de tu visita y nos reconcilies con tu Hijo, para que merezcamos llegar al esplendor de su gloria. A él sea dada honra y gloria por los siglos de los siglos. Amén.

El Espíritu Santo, amor del Padre y del Hijo, se digne cubrir con su caridad la multitud de nuestros pecados. A Él se debe honra y gloria por los siglos de los siglos. Amén.

Antífona: Mirad a mi siervo Antonio, a quien sostengo; mi elegido, a quien prefiero; sobre él he puesto mi espíritu. No se desvanecerá su memoria, y su nombre se repetirá de generación en generación.

De los milagros de San Antonio

Una mujer de Tremiñón, por nombre Vida, ferventísima devota del bienaventurado Antonio, anhelaba con toda su alma visitar su sepulcro. Pero se acercaba el tiempo de la cosecha, y bandadas de gorriones causaban gran estrago en el panizo, que ya blanqueaba próximo a su sazón, y como ella estaba puesta de guardiana para espantar a tan importuno género de pajarillos, no tenía ninguna posibilidad de ponerse en camino. Llegando un día a la cerca que rodeaba el panizal, prometió que si el bienaventurado Antonio lo guardaba de los gorriones, visitaría nueve veces su sepulcro. Apenas hecha la promesa, cuando una nube de los dichos pájaros abandonó el lugar en una sola bandada, y vio que no quedó ni un solo gorrión sobre los sauces que circundaban el panizal. La buena mujer se apresuró a dar cumplimiento a su anhelo.


Plegaria

Recuerda, Señor, que tu misericordia y tu ternura son eternas. Con la confianza que nos da el sabernos hijos tuyos e invocando la intercesión de tu siervo san Antonio, al que atiendes con largueza, te presentamos nuestras peticiones: ...... ...... ......

Oración final

Dios todopoderoso y eterno, tú que has dado a tu pueblo en la persona de san Antonio de Padua un predicador insigne y un intercesor poderoso, concédenos seguir fielmente los principios de la vida cristiana, para que merezcamos tenerte como protector en todas las adversidades. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

V. Bendigamos al Señor.
R. Demos gracias a Dios.

LECTURAS BÍBLICAS DE HOY JUEVES 4 DE JUNIO DE 2020


Lecturas de hoy Jesucristo, sumo y eterno sacerdote
Hoy, jueves, 4 de junio de 2020



Primera lectura
Lectura del libro de Jeremías (31, 31-34):

Ya llegan días – oráculo del Señor – en que haré con la casa de Israel y la casa de Judá una alianza nueva. No será un alianza como la que hice con sus padres, cuando los tomé de la mano para sacarlos de Egipto, pues quebrantaron mi alianza, aunque yo era su Señor – oráculo del Señor -.

Esta será la alianza que haré con ellos después de aquellos días – oráculo del Señor – : Pondré mi ley en su interior y la escribiré en sus corazones; yo seré su Dios y ellos serán mi pueblo. Y no tendrán que enseñarse unos a otros diciendo:

«Conoced al Señor», pues todos me conocerán, desde el más pequeño al mayor – oráculo del Señor -, cuando perdone su culpa y no recuerde ya sus pecados.

Palabra de Dios


Salmo
Salmo: Sal 109, 1bcde. 2.3

R. Tú eres sacerdote eterno, según el rito de Melquisedec.

Oráculo del Señor a mi Señor:
«Siéntate a mi derecha,
y haré de tus enemigos
estrado de tus pies». R.

Desde Sion extenderá el Señor
el poder de tu cetro:
somete en la batalla a tus enemigos. R.

«Eres príncipe desde el día de tu nacimiento
entre esplendores sagrados:
yo mismo te engendré, desde el seno,
antes de la aurora». R. R/.



Evangelio de hoy
Lectura del santo Evangelio según san Marcos (14, 12a. 22-25):

El primer día de los Ácimos, cuando se sacrificaba el cordero pascual, mientras comían, Jesús tomó pan, y pronunciando la bendición, lo partió y se lo dio diciendo:

«Tomad, esto es mi cuerpo».

Después tomó el cáliz, pronunció la acción de gracias, se lo dio y todos bebieron. Y les dijo:

«Esta es mi sangre de la alianza, que es derramada por muchos. En verdad os digo que no volveré a beber del fruto de la vid hasta el día que beba el vino nuevo en el reino de Dios».

Palabra del Señor




Comentario al Evangelio de hoy jueves, 4 de junio de 2020
Óscar Romano, cmf


A la paz de Dios:

Equiparar sacerdocio y sacramentos tiene sus peligros. Porque Jesucristo no fue sacerdote de sacramentos.

Bautismo. Que se sepa el suyo; parece que no bautizo a nadie. Era lo que recibió un bautismo de conversión. Si acaso quiere de nosotros un bautismo de Espíritu.

Confirmación. Cuando la llegada del Espíritu en Pentecostés él ya se había ido.

Eucaristía. La primera que fue la última (cena). Una eucaristía que vale toda una vida: cuerpo que se entrega, sangre que se derrama.

Reconciliación. De esto sí que tuvo varias: su vida fue abrir puertas de perdón y misericordia. Aunque los puristas dirán que la fórmula no estaba completa.

Unción. Grande fue su preocupación por la salud de los que peor lo pasaban. Era frecuente oírle decir cuando preguntaba por alguien: que se mejore. Y el caso era que mejoraban.

Orden. Lo suyo iba en otro orden de cosas.

Matrimonio. Que se sepa sí estuvo en una boda, pero nada hace indicar que fuera el testigo cualificado. Lo que sí sabemos es que estuvo en el banquete (hizo un Hannover).

Y entonces, ¿sacerdote?

El sacerdocio de la cercanía. Leer el comentario del lunes.
El sacerdocio del agradecimiento. Leer el comentario del martes.
El sacerdocio de la vida. Leer el comentario del miércoles.
El sacerdocio de la escucha. Leer el comentario del viernes.
El sacerdocio de la generosidad. Leer el comentario del sábado.

Vuestro hermano y amigo
Óscar Romano

BIENVENIDOS





miércoles, 3 de junio de 2020

10 CONSEJOS DE LOS SANTOS PARA AMAR LA EUCARISTÍA


10 consejos de los santos para amar la Eucaristía
La Iglesia durante siglos ha animado a amar este gran milagro del amor de Dios


Por: n/a | Fuente: ACI Prensa




La Iglesia siempre ha destacado la presencia real del Señor en el Sacramento de la Eucaristía y durante siglos ha animado a amar este gran milagro del amor de Dios.

A continuación, 10 consejos de los santos sobre la Eucaristía:

1. San Francisco de Asís

"Cuando no puedo asistir a la Santa Misa, adoro el Cuerpo de Cristo con los ojos del espíritu en la oración, lo mismo que le adoro cuando le veo en la Misa”. 

2. San Alfonso María de Ligorio





"Tened por cierto el tiempo que empleéis con devoción delante de este divinísimo Sacramento, será el tiempo que más bien os reportará en esta vida y más os consolará en vuestra muerte y en la eternidad. Y sabed que acaso ganaréis más en un cuarto de hora de adoración en la presencia de Jesús Sacramentado que en todos los demás ejercicios espirituales del día”. 

3. San Francisco de Sales

"La oración, unida con ese divino sacrificio de la Misa, tiene una fuerza indecible; de modo que por este medio abunda el alma de celestiales favores como apoyada sobre su Amado". 

4. San Luis María Griñón de Monfort

"Antes de la Comunión... suplica a esta bondadosa Madre que te preste su corazón para recibir en él a su Hijo con sus propias disposiciones”. 


5. Santa Teresa de Jesús (o de Ávila)

"Acabando de recibir al Señor, pues tenéis la misma persona delante, procurad cerrar los ojos del cuerpo y abrir los del alma, y miraros al corazón”.

6.- El Cura de Ars, San Juan María Vianney

“Si supiéramos el valor del santo sacrificio de la Misa, qué esfuerzo tan grande haríamos por asistir a ella”.

7. Santa Teresita de Lisieux

“Recordé haber oído decir que el día de la primera comunión se alcanzaba todo lo que se pedía. Aquel pensamiento me consoló y, aunque todavía no tenía más que seis años, me dije para mí: ‘el día de mi primera comunión rezaré por mi pobre’”.

8. San Juan Pablo II

“Queridos hermanos y hermanas: debemos sentirnos interpelados por las necesidades de tantos hermanos. No podemos cerrar el corazón a sus peticiones de ayuda. Y tampoco podemos olvidar que ‘no solo de pan vive el hombre’. Necesitamos el ‘pan vivo bajado del cielo’. Este pan es Jesús. Alimentarnos de él significa recibir la vida misma de Dios, abriéndonos a la lógica del amor y del compartir”.

9. Santa Catalina de Siena

“¡Oh Caridad inestimable! Te quedaste con nosotros como alimento, mientras somos peregrinos en esta tierra, para que no desfallezcamos por el cansancio, sino que fortalecidos por ti, alimento celestial, sigamos el camino”.

10. Don Bosco (San Juan Bosco)

“Queridos jóvenes, ¿queremos estar contentos y alegres? Amemos con todo el corazón a Jesús Sacramentado".

PAPA FRANCISCO CONFÍA A LA VIRGEN DE GUADALUPE ACTOS DE VIOLENCIA EN LOS ESTADOS UNIDOS


Papa Francisco confía a la Virgen de Guadalupe actos de violencia en los Estados Unidos
POR MERCEDES DE LA TORRE | ACI Prensa
 Foto: Marina Testino / ACI Prensa



El Papa Francisco rezó este 3 de junio por los Estados Unidos debido a los recientes disturbios sociales de violencia tras la trágica muerte de George Floyd y confió a la intercesión de la Virgen de Guadalupe, Madre de América, a quienes trabajan por la paz y la justicia.

Tras pronunciar su catequesis en italiano centrada en la oración de Abraham, el Santo Padre dirigió un mensaje particular a los fieles de lengua inglesa, quienes pudieron seguir la Audiencia General de los miércoles a través de los medios de comunicación.

En concreto, el Pontífice dijo a “los queridos hermanos y hermanas de los Estados Unidos” que sigue “con gran preocupación los dolorosos disturbios sociales que se están produciendo en su nación en estos días, tras la trágica muerte del señor George Floyd”.

El Santo Padre afirmó que no es posible “tolerar ni cerrar los ojos ante ningún tipo de racismo o exclusión y pretender defender la santidad de toda vida humana”.

Nada se gana con la violencia
Por ello, el Papa Francisco exhortó a reconocer que “la violencia de las últimas noches es autodestructiva y provoca autolesión. Nada se gana con la violencia y mucho se pierde”, advirtió.

En este sentido, el Santo Padre pidió rezar “por el consuelo de las familias y amigos afligidos” y “por la reconciliación nacional y la paz que anhelamos”.

“Que Nuestra Señora de Guadalupe, Madre de América, interceda por todos los que trabajan por la paz y la justicia en su tierra y en el mundo. Dios los bendiga a todos ustedes y a sus familias”, oró el Papa quien dijo también que hoy se une “a la Iglesia de San Pablo y Minneapolis, y a todos los Estados Unidos, para rezar por el descanso del alma de George Floyd y de todos los demás que han perdido sus vidas por el pecado del racismo”.

Por su parte, los presidentes de los distintos comités de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos (USCCB, por sus siglas en inglés) se manifestaron “con el corazón roto, asqueados e indignados” por la muerte de George Floyd tras ser arrestado y agredido por un grupo de policías en Minneapolis, estado de Minnesota.


Tal como quedó registrado en distintos videos, el 25 de mayo un grupo de policías de Minneapolis detuvieron y agredieron a Floyd, afroamericano de 46 años, acusándolo de haber usado un billete falso de 20 dólares en una tienda local y de resistirse a la autoridad.

En un comunicado publicado el 29 de mayo, los obispos estadounidenses afirmaron: “estamos con el corazón roto, asqueados e indignados al ver otro video de un hombre afroamericano siendo asesinado ante nuestros ojos”.

“Lo que es más sorprendente es que esto está sucediendo a pocas semanas de otros hechos similares. Esta es la más reciente llamada de atención que necesita ser atendida por cada uno de nosotros en un espíritu decidido de conversión”, pidieron los obispos estadounidenses.

LECTURAS BÍBLICAS DE HOY MIÉRCOLES 3 DE JUNIO DE 2020


Lecturas de hoy Miércoles de la 9ª semana del Tiempo Ordinario
Hoy, miércoles, 3 de junio de 2020



Primera lectura
Lectura de la segunda carta del san Pablo a Timoteo (1,1-3.6-12):

Pablo, apóstol de Cristo Jesús por designio de Dios, llamado a anunciar la promesa de vida que hay en Cristo Jesús, a Timoteo, hijo querido; te deseo la gracia, misericordia y paz de Dios Padre y de Cristo Jesús, Señor nuestro. Doy gracias a Dios, a quien sirvo con pura conciencia, como mis antepasados, porque tengo siempre tu nombre en mis labios cuando rezo, de noche y de día. Por esta razón te recuerdo que reavives el don de Dios, que recibiste cuando te impuse las manos; porque Dios no nos ha dado un espíritu cobarde, sino un espíritu de energía, amor y buen juicio. No te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor y de mí, su prisionero. Toma parte en los duros trabajos del Evangelio, según la fuerza de Dios. Él nos salvó y nos llamó a una vida santa, no por nuestros méritos, sino porque, desde tiempo inmemorial, Dios dispuso darnos su gracia, por medio de Jesucristo; y ahora, esa gracia se ha manifestado al aparecer nuestro Salvador Jesucristo, que destruyó la muerte y sacó a la luz la vida inmortal, por medio del Evangelio. De este Evangelio me han nombrado heraldo, apóstol y maestro, y ésta es la razón de mi penosa situación presente; pero no me siento derrotado, pues sé de quién me he fiado y estoy firmemente persuadido de que tiene poder para asegurar hasta el último día el encargo que me dio.

Palabra de Dios


Salmo
Sal 122

R/. A ti, Señor, levanto mis ojos

A ti levanto mis ojos,
a ti que habitas en el cielo.
Como están los ojos de los esclavos
fijos en las manos de sus señores. R/.

Como están los ojos de la esclava
fijos en las manos de su señora,
así están nuestros ojos
en el Señor, Dios nuestro,
esperando su misericordia. R/.


Evangelio de hoy
Lectura del santo evangelio según san Marcos (12,18-27):

En aquel tiempo, se acercaron a Jesús unos saduceos, de los que dicen que no hay resurrección, y le preguntaron: «Maestro, Moisés nos dejó escrito: "Si a uno se le muere su hermano, dejando mujer, pero no hijos, cásese con la viuda y dé descendencia a su hermano." Pues bien, había siete hermanos: el primero se casó y murió sin hijos; el segundo se casó con la viuda y murió también sin hijos; lo mismo el tercero; y ninguno de los siete dejó hijos. Por último murió la mujer. Cuando llegue la resurrección y vuelvan a la vida, ¿de cuál de ellos será mujer? Porque los siete han estado casados con ella.»
Jesús les respondió: «Estáis equivocados, porque no entendéis la Escritura ni el poder de Dios. Cuando resuciten, ni los hombres ni las mujeres se casarán; serán como ángeles del cielo. Y a propósito de que los muertos resucitan, ¿no habéis leído en el libro de Moisés, en el episodio de la zarza, lo que le dijo Dios: "Yo soy el Dios de Abrahán, el Dios de Isaac, el Dios de Jacob"? No es Dios de muertos, sino de vivos. Estáis muy equivocados.»

Palabra de Dios




Dios de los vivos


Es una verdad fundamental que la Escritura y la Tradición no cesan de enseñar y de celebrar: “El mundo ha sido creado para la gloria de Dios”. Dios ha creado todas las cosas, explica S. Buenaventura, “no para aumentar su gloria, sino para manifestarla y comunicarla.” Porque Dios no tiene otra razón para crear que su amor y su bondad: “Abierta su mano con la llave del amor surgieron las criaturas”. (Tomás de Aquino)

    La gloria de Dios consiste en que se realice esta manifestación y esta comunicación de su bondad para las cuales el mundo ha sido creado. Hacer de nosotros “hijos adoptivos por medio de Jesucristo, según el beneplácito de su voluntad, para alabanza de la gloria de su gracia” (Ef 1,5-6): “Porque la gloria de Dios es el hombre vivo, y la vida del hombre es la visión de Dios: si ya la revelación de Dios por la creación procuró la vida a todos los seres que viven en la tierra, cuánto más la manifestación del Padre por el Verbo procurará la vida a los que ven a Dios.” (San Ireneo) El fin último de la creación es que Dios, “Creador de todos los seres, se hace por fin ‘todo en todas las cosas’ (1 Cor 15,28), procurando al mismo tiempo su gloria y nuestra felicidad” (Concilio Vaticano II).   

PAPA FRANCISCO REZARÁ NOVENA POR SACERDOTES DEL 11 AL 19 DE JUNIO


Papa Francisco rezará por sacerdotes en iniciativa de oración al Sagrado Corazón
POR MERCEDES DE LA TORRE | ACI Prensa
 Foto: Vatican Media



El Papa Francisco rezará para que los sacerdotes en todas partes del mundo “sean confirmados en su ministerio de proclamar y celebrar el amor misericordioso de Cristo redentor”.

Así lo indicó el Santo Padre en una carta dirigida a Mons. Michael Neary, Arzobispo de Tuam (Irlanda) con ocasión de la iniciativa anual global de oración del Rosario por los sacerdotes del mundo.

En este año 2020, la edición del Rosario global por la santificación de los sacerdotes en la Fiesta del Sagrado Corazón de Jesús se llevará a cabo el 19 de junio. Se trata de la undécima vez que personas de más de 85 países del mundo rezan juntos por esta intención.

Por ello, el Papa Francisco envió una misiva firmada por el Secretario de Estado, Cardenal Pietro Parolin, con fecha del pasado 25 de abril.

“Su Santidad Papa Francisco, se alegró al saber sobre la iniciativa ‘Annual Global Rosary Relay for Priests’ que se llevará a cabo en la Solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús”.

Además, el Santo Padre ha bendecido esta iniciativa y señaló que se sumará a la oración para que “los sacerdotes de todas partes puedan ser confirmados en su ministerio de proclamar y celebrar el amor misericordioso de Cristo redentor y sean cada vez más plenamente pastores según su Corazón”.

En este sentido, www.worldpriest.com está organizando una Novena en preparación al Rosario global que se llevará a cabo del 11 al 19 de junio.

Las meditaciones fueron escritas por P. Bernard McGuckian SJ, capellán de worldpriest y están disponibles en este enlace.


ROSARIO RELEVADOR MUNDIAL DE
NOVENA AL SAGRADO CORAZÓN

ESTA NOVENA FUE ESCRITA ESPECIALMENTE PARA EL RELEVANTE MUNDIAL ANUAL DEL ROSARIO GLOBAL PARA LA SANTIFICACIÓN DE SACERDOTES
POR BERNARD MCGUCKIAN SJ CAPITÁN MUNDIAL DEL SACERDOTE


DÍA UNO
DÍA UNO SAGRADO CORAZÓN NOVENA
Patronos del primer día: los dos discípulos en el camino a Emaús: Lucas 24: 1-35

"¡Si alguna vez te encuentras en un tren francés, pregúntale a la persona a tu lado a dónde va!" Este fue el consejo que me dio el difunto P. Fergal McGrath, nuestro Superior jesuita en el Castillo Rathfarnham, Dublín. Era 1963 y me disponía a estudiar filosofía en Francia. Debo confesar que esperaba algún consejo de una naturaleza más espiritual.
Aproximadamente un año después, llegué sin aliento a la estación de tren de Lyons, justo a tiempo para tomar el Express in Paris a las 3 p.m. Acabo de hacerlo. ¡Uf! Mientras tomaba asiento, estaba agradeciendo a mis estrellas de la suerte. Pude ver al Stationmaster en la Plataforma haciendo su último chequeo. Las palabras del P. Fergal volvieron a mí. Había decidido sacarlos de mi mente cuando el hombre frente a mí miró su copia de Le Monde. "¿París?" Dije casualmente. "Más no! Marsella! Él gritó. Nunca me dirigí a una puerta más rápido en mi vida. Estaba cerrando cuando salí. Le grité al jefe de estación. "¿París?" "La" señaló las puertas que se cerraban al otro lado de la plataforma. Acabo de hacerlo.
En su Evangelio, San Lucas nos cuenta acerca de dos hombres que iban por el camino equivocado: alejándose de Jerusalén, decepcionados y tristes, dirigiéndose a un lugar llamado Emaús. Tomar decisiones cuando está desolado es una mala idea, como advierte Ignacio de Loyola. Son invariablemente desaconsejados.
Un extraño se unió a ellos. En la mesa celebró la Eucaristía, la primera registrada después de su Gloriosa Resurrección. “Tomó el pan y dijo la bendición; luego lo rompió y se lo entregó ”. Cuando desapareció, se dieron cuenta de quién había estado caminando con ellos. "¿No ardieron nuestros corazones dentro de nosotros cuando nos habló en el camino y nos explicó las Escrituras?" Lucas 24:32. Aún más importante, inmediatamente cambiaron de dirección y regresaron a Jerusalén y finalmente a la Jerusalén celestial.
En el primero de nuestros nueve días de oración, quizás podríamos tomarnos un momento para considerar en silencio un cambio de dirección en algún aspecto de nuestras propias vidas.


ORACIÓN DE NOVENA
Señor Jesús que una vez dijiste, pide y recibirás, busca y encontrarás, toca y se te abrirá la puerta. Vengo hoy con fe en tus palabras, esperanza en tus promesas y amor por tu Sagrado Corazón. Otorgue el favor que le pido en esta Novena 
( aquí mencione su solicitud ). 
Pero si lo que pido no es por Tu Gloria o por el bien de mi alma, obtén para mí lo que sea más propicio para ambos. Amén
Padre nuestro ... Dios te salve María ... Gloria al Padre, etc.


DÍA DOS
DÍA DOS SAGRADO CORAZÓN NOVENA
PATRÓN DEL DÍA: 
SAN JUAN EVANGELISTA: JUAN 19: 25-27.
FIESTA: 29 DE DICIEMBRE

En la Última Cena, San Juan Evangelista, el discípulo amado descansó su cabeza sobre el pecho de Jesús. Según la tradición, fue esta proximidad al Corazón de Jesús lo que le permitió escribir con tanta autoridad sobre la vida interior del Salvador, tan evidente en su evangelio. Fue el único de los 12 apóstoles que siguió fielmente a Jesús hasta la cima del monte Calvario. Los otros se habían escapado.
En Juan 19 aprendemos que una de las últimas cosas que hizo Jesús antes de expirar en la Cruz fue su Madre y el Discípulo Amado. Cuando prediqué por primera vez sobre este pasaje, citando de memoria, le atribuí a Jesús lo siguiente: "Madre, mira a tu Hijo" y luego "Hijo, mira a tu Madre". Parecía muy bien equilibrado. Sin embargo, un colega jesuita mayor señaló que estaba citando a San Juan de manera incorrecta. Lo que Juan escribió fue diferente: “ Mujer, mira a tu hijo ” y al Amado Discípulo, “ Mira a tu madre ”.
Jesús se dirigió a María como "Mujer", no Madre. Este es un desafío a la fe de todos nosotros. Para la gente de Nazaret que conocía a la familia de Jesús, María y José en Nazaret, no era necesario tener fe para saber que María era su Madre. Pero saber que ella es la "Mujer", la Nueva Eva y ahora Madre de todos nosotros, requiere fe. Nuevamente, Jesús no se dirigió al Discípulo Amado como "Hijo". El discípulo amado no era un "Hijo" de Aquel que moría en la cruz. Al convertirse en un Hijo de María y, en consecuencia, un hermano de Jesús, representa a cada hombre o mujer que ha vivido o vivirá. “He aquí tu madre”. Este último deseo de Jesús es una invitación para que todos reconozcamos a la Mujer que también fue Su Madre como nuestra Madre. Este evento parece anticipar la doctrina de la adopción divina tan amada de San Pablo.
"Al morir es una cosa terrible caer en manos de un Dios vivo si durante la vida hemos rechazado el abrazo de un Dios moribundo". Santa Margarita María Alacoque. Cf. Hebreos 10:31


ORACIÓN DE NOVENA
Señor Jesús, una vez dijiste, pide y recibirás, busca y encontrarás, toca y se te abrirá la puerta. Vengo hoy con fe en tus palabras, esperanza en tus promesas y amor por tu Sagrado Corazón. Otorgue el favor que le pido en esta Novena 
( aquí mencione su solicitud ). 
Pero si lo que pido no es por Tu Gloria o por el bien de mi alma, obtén para mí lo que sea más propicio para ambos. Padre nuestro ... Dios te salve María ... Gloria al Padre, etc.


DÍA TRES
DÍA TRES: NOVENA EN HONOR DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS.
PATRÓN: SAN PABLO. FIESTA DE LA CONVERSIÓN DE SAN PABLO: 25 DE ENERO

El Capítulo 13 de la Primera Carta de San Pablo a la gente de Corinto ha sido descrito como las 300 palabras más bellas jamás escritas. Puedes echarles un vistazo por ti mismo. ¡Podrías leer todo en unos dos minutos planos!
Él les cuenta todas las maravillosas cualidades que podría tener, pero si no los amo, ni siquiera vale la pena hablar de ellos: la capacidad de hablar todos los idiomas que hay, ya sea en el cielo o en la tierra, la capacidad de comprender cada misterio concebible, la fe en mover las montañas mismas, estar preparado para despojarme de todo en favor de los pobres e incluso ir tan lejos como para ofrecer mi cuerpo para quemarlo vivo. Decir que estas son cualidades impresionantes sería una gran subestimación.
Sin embargo, Pablo insiste en que sin amor estas cualidades no valen nada. Las cualidades que luego describe como características del amor parecen tan insignificantes en comparación con las cualidades extraordinarias que acaba de describir, pero todos son regalos del Sagrado Corazón para cada uno de nosotros.
“El amor siempre es paciente y amable; el amor nunca es celoso; el amor no es jactancioso ni engreído, nunca es grosero y nunca busca su propia ventaja, no se ofende ni guarda agravios. El amor no se regocija ante las malas acciones, sino que encuentra su alegría en la verdad. Siempre está listo para hacer concesiones, confiar, esperar y soportar lo que venga ”. 1 Corintios: 4-7.
Leer estas líneas ayudó a Santa Teresa de Lisieux a descubrir su vocación de ser "amor en el corazón de la Iglesia" y convertirse en copatrocinadora junto con San Francisco Javier de toda la misión de la Iglesia.


ORACIÓN DE NOVENA
Señor Jesús, una vez dijiste que preguntes y recibirás, busca y encontrarás, toca y la puerta se te abrirá. Vengo ante ustedes hoy con fe en sus palabras, esperanza en sus promesas y amor por su Sagrado Corazón. Otorgue el favor que le pido en esta Novena 
( aquí mencione su solicitud ). 
Pero si lo que pido no es por Tu Gloria o por el bien de mi alma, obtén para mí lo que sea más propicio para ambos. Amén.
Nuestro Padre ………………… Dios te salve María …………………. Gloria al Padre, etc.


DÍA CUATRO
DÍA CUATRO: SAGRADO CORAZÓN NOVENA
PATRÓN: SANTA MARÍA MAGDALENA: 
FIESTA 22 DE JULIO

Le tomó cerca de 2000 años a Santa María Magdalena que la Iglesia le diera pleno reconocimiento por su papel en la historia de la salvación. Según los Evangelios, ella fue la primera persona en ver a Cristo resucitado. También se registra que el Señor la envió a contarle su experiencia a Pedro y a los demás. Por esta razón, ahora es oficial y más propiamente conocida como la "Apóstol de los Apóstoles". De ahora en adelante, los sacerdotes están obligados a ofrecer misa en su honor en su fiesta, el 22 de julio. Ya no es simplemente opcional.
Las escrituras destacan dos cosas que ella hizo. La primera de ellas es que ella hizo algo que solo los jóvenes hacen. Ella corrío. Las Escrituras nos dicen que tan pronto como descubrió que la tumba estaba vacía, corrió para contarles a Peter y John. Luego, a su vez, corrieron para comprobar por sí mismos. John, el menor de los dos, nos dice que corrió más rápido que Peter. Después de la Resurrección, todos estamos invitados a correr e incluso a volar, independientemente de nuestra edad. "El Señor renueva tu juventud como el águila" Salmo 103 (102)
La otra cosa que destacan los Evangelios es el llanto de María. Mientras estaba desconsolada ante la tumba, sus ojos estaban llenos de lágrimas. Un místico dijo una vez que hay cosas que solo se pueden ver a través de los ojos llenos de lágrimas. Las lágrimas de Mary terminaron y toda la verdad se dio cuenta de ella cuando Aquel que presumió ser la Jardinera simplemente dijo "Mary". Él nos conoce a todos por su nombre también. ¡Su amor por nosotros es tan personal como eso!


ORACIÓN DE NOVENA
Señor Jesús, una vez dijiste, pide y recibirás, busca y encontrarás, toca y la puerta se te abrirá. Vengo ante ustedes hoy con fe en sus palabras, esperanza en sus promesas y amor por su Sagrado Corazón. Otorgue el favor que le pido en esta Novena ( aquí mencione su solicitud ). Pero si lo que pido no es por Tu Gloria o por el bien de mi alma, obtén para mí lo que sea más propicio para ambos.
Nuestro Padre ……………………. Dios te salve María ………………… .. Gloria al Padre, etc.


DIA CINCO
DÍA CINCO: SAGRADO CORAZÓN NOVENA
PATRON: SANTA GERTRUDIS (1256-1302): FIESTA: 16 DE NOVIEMBRE

La devoción al Sagrado Corazón de Jesús comenzó en el Calvario cuando el Centurión romano hundió su lanza en el Lado Sagrado de Nuestro Salvador, para asegurarse de que estaba realmente muerto. Aprendemos esto de San Juan, que presenció el evento tal como sucedió. Esto lo llevó a recordar la profecía de Zacarías muchos siglos antes: "Ellos mirarán al que traspasaron" Zacarías 12:10. Sin embargo, por extraño que parezca, el enfoque en la vida de oración de los cristianos en los siglos posteriores fue el Herida en el costado y no en el corazón perforado. Fue todo un milenio después que San Anselmo de Canterbury (1033-1109) hizo hincapié en la perforación del Corazón del Salvador. Por esta idea, ha sido conocido por los teólogos a lo largo de los años como Padre de la Devoción al Sagrado Corazón.
Algunos de los grandes santos del calendario de la Iglesia se inspiraron en esta intuición de san Anselmo. Entre ellos están Bernardo de Claraval, Francisco de Asís y Gertrudis el Grande. En el siglo XIII, el Señor se le apareció a San Gertrudis, una monja benedictina mística y alemana. Él le reveló algunos de los secretos de Su Corazón en una serie de visiones extraordinarias. Algo similar ocurriría varios siglos después en la vida de Santa Margarita María Alacoque, una monja de Visitación en su Monasterio en Paray le Monial, en el este de Francia.
En sus escritos, Gertrude nos dice que una vez se quejó al Señor por su falta de progreso en la vida espiritual. "A pesar de todos mis esfuerzos", le dijo, "todavía me encuentro afligida por las mismas imperfecciones y defectos". El Señor respondió a su pedido.
"Gertrude, ¿qué haces cuando te ensucias el dedo?"
"Fuí golpeado".
"¿Lavas qué?" Gertrude hizo una pausa por un momento antes de responder.
"Me lavo toda la mano". Sabía que es difícil, si no imposible, lavarse un dedo sin lavarse la mano.
Con este sencillo ejemplo, el Señor le mostró a Gertrude cómo nos purifica y perfecciona en el Sacramento de la Penitencia.
"Al presentarte frecuentemente ante Mí en el Sacramento de la Penitencia, te purifico más y más en Mi Preciosa Sangre".



ORACIÓN DE NOVENA
Señor Jesús, una vez dijiste, pregunta y recibirás, busca y encontrarás, toca y la puerta se te abrirá. Vengo a ti hoy con fe en tus palabras, esperanza en tus promesas y amor por tu Sagrado Corazón. Otorgue el favor que le pido en esta Novena
( aquí mencione su solicitud ). 
Pero si lo que pido no es para tu gloria o para el bien de mi alma, obtén para mí lo que sea más propicio para ambos. Amén.
Nuestro Padre ……………. Salve María ……………… Gloria al Padre, etc.


DÍA SEIS
DÍA SEIS: NOVENA AL SAGRADO CORAZÓN
PATRÓN: SAN JULIANNA DE LIEJA. Fiesta: 6 de abril.

La Fiesta del Corpus Christi (El Cuerpo de Cristo) se introdujo en el calendario de la Iglesia en 1264. Se celebra cada año, ya sea el jueves o el domingo después del Domingo de la Trinidad. Esto se produjo como resultado de misteriosas visiones recibidas por Julianna en su Monasterio Norbertine cerca de Lieja, Bélgica, algunos años antes. Por sus experiencias, ella concluyó que el Señor estaba pidiendo una nueva Fiesta que se enfocaría en Su gran don de Sí mismo a la humanidad en la Eucaristía. Al enterarse de su mensaje, su obispo local estableció esta fiesta en su propia diócesis. Un joven sacerdote francés, Jacques Pantaleon, que estaba trabajando en el área de Lieja en ese momento, prestó mucha atención a su informe y las discusiones que siguieron. Al igual que el obispo de Julianna, estaba convencido de que la solicitud que se le hizo era realmente de origen divino.
En cierto sentido, cada Misa es una celebración del Cuerpo de Cristo que fue entregado por nuestros pecados y ahora está sentado a la diestra del Padre haciendo intercesión por nosotros. Sin embargo, en la Fiesta del Corpus Christi, la Iglesia nos invita a centrarnos en el amor en el Corazón del Señor por cada uno de nosotros y no en sus sufrimientos, atroces y terribles como realmente fueron. San Anselmo, Padre de la Devoción al Sagrado Corazón, había dicho que “Jesús no nos salvó a través del sufrimiento. Nos salvó a través del amor en el sufrimiento ”.
Corazón de Jesús en llamas con amor por mí, Inflama mi corazón con amor por Ti.


ORACIÓN DE NOVENA
Señor Jesús, una vez dijiste, pregunta y recibirás, busca y encontrarás, toca y se te abrirá la puerta, hoy vengo ante ti con fe en tus palabras, esperanza en tus promesas y amor por Tu Sagrado Corazón. Otorgue el favor que le pido en esta Novena 
( aquí mencione su solicitud ). 
Pero si lo que pido no es por tu Gloria o por el bien de mi alma, obtén para mí lo que sea más propicio para ambos. Amén.
Nuestro Padre ……………… .. Dios te salve …………………… Gloria al Padre, etc. ……


DÍA SIETE
7. DÍA SIETE: NOVENA AL SAGRADO CORAZÓN
PATRONES: SAN MARGARITA MARIA ALACOQUE: FIESTA 16 DE OCTUBRE Y SAN CLAUDE LA COLOMBIERE: FIESTA 15 DE FEBRERO

Durante la octava (período posterior de 8 días) de la Fiesta del Corpus Christi, 1675, Nuestro Señor se le apareció a Margaret Mary Alacoque en su Monasterio de Visitación en Paray-le-Monial, en el este de Francia. Al mostrarle Su Sagrado Corazón, que le parecía un horno en llamas, Jesús dijo: "He aquí este Corazón que ha amado tanto a todos los hombres y mujeres que no ha escatimado nada ni siquiera en agotarse y consumirse para demostrarles su amor. A cambio, recibo del mayor número nada más que ingratitud, desprecio, irreverencia, sacrilegio y frialdad en este sacramento de mi amor. Pero lo que siento aún más es que hay corazones consagrados a Mí que me usan así. Por lo tanto, les pido que el viernes después de la Octava del Santísimo Sacramento se mantenga como un Festival especial en honor a mi Corazón. para reparar las indignidades que se le ofrecen y como día de comunión, para expiar el trato indigno que ha recibido cuando se expone sobre los altares. También prometo que mi Corazón derramará en abundancia la influencia de Su amor divino en todos aquellos que lo honren o hagan que sea tan honrado "
Margaret Mary estaba profundamente perturbada por esta experiencia extraordinaria, ya que solo quería llevar una vida religiosa simple como todos los demás. Se preguntó si estaba teniendo alucinaciones. Le confió sus preocupaciones a Claude La Colombiere, el recientemente nombrado Capellán Jesuita a su comunidad. Pronto concluyó que su experiencia fue genuina y que la Segunda Persona de la Santísima Trinidad se había revelado a sí misma a esta joven. Su profunda humildad lo impresionó. Los falsos místicos son demasiado rápidos para concluir el origen divino de sus experiencias inusuales.
"Por sus frutos los conoceréis" (Mateo 7: 16-20). Estas revelaciones conducirían a un crecimiento fenomenal en la Devoción al Corazón de Cristo en los siglos posteriores. Los molinos de Dios pueden moler lentamente, pero lo hacen con seguridad. Pasarían casi doscientos años antes de que el Señor le pidiera que se introdujera una fiesta en honor de Su Sagrado Corazón en la Liturgia de la Iglesia. Eventualmente llegó en 1856. Margaret Mary misma sería canonizada el 13 de mayo de 1920. (El Papa San Juan Pablo 11 nació cinco días después). Margaret Mary dijo de Claude que "él era todo poderoso en lo que se refiere a la devoción al Sagrado Corazón". Claude fue canonizado el 31 de mayo de 1992.
Podemos confiar todas nuestras preocupaciones a la tierna misericordia del Sagrado Corazón de Jesús.


ORACIÓN DE NOVENA
Señor Jesús, una vez dijiste, pide y recibirás, buscarás y encontrarás, tocarás y la puerta se te abrirá. Vengo ante ustedes hoy con fe en sus palabras, esperanza en sus promesas y amor por su Sagrado Corazón. Otorgue el favor que le pido en esta Novena 
( aquí mencione su solicitud ). 
Pero si lo que pido no es por tu Gloria o por el bien de mi alma, obtén para mí lo que sea más propicio para ambos. Amén
Padre nuestro ... Dios te salve María ... Gloria al Padre, etc.

DIA OCHO
DÍA OCHO: NOVENA AL SAGRADO CORAZÓN
PATRON: ST THERESE OF LISIEUX FEASTDAY 1 DE OCTUBRE.

En 1888, Therese Martin ingresó a un convento carmelita cerrado en Normandía, al norte de Francia a los 15 años. Nunca volvió a abandonar su convento hasta que murió en éxtasis menos de una década después, víctima de la tuberculosis. Durante esos años entendió su vocación como un llamado a orar por las bendiciones divinas en el trabajo de los sacerdotes para la salvación de las almas en todos los rincones del mundo. Para hacer esto no fue necesario viajar por todo el lugar. Sabía que ser una monja encerrada no le impedía tener un espíritu en todo el mundo. Ahora, conocida como Santa Teresa de Lisieux o más popularmente como "La Pequeña Flor", continúa este trabajo desde el cielo. El Papa Benedicto XV dijo, cuando declaró a su co-Patrono de las Misiones con San Francisco Javier que ella continuaría desempeñando este papel "hasta el final de los tiempos".
Teresa sabía que Dios la llamó, como lo hace a cada uno de nosotros, para ser una santa. Con su canonización, su "Little Way" fue canonizada con ella. Esto significa que Dios simplemente nos pide que hagamos las pequeñas cosas ordinarias de la vida cotidiana lo más perfectamente posible. Ella misma hizo las cosas ordinarias "extraordinariamente bien". También sabía que hacer esto está más allá de nuestros poderes sin ayuda. Jesús no le recordó a sus seguidores: "Sin mí, no puedes hacer nada". Juan 15: 5? Pero también prometió estar con nosotros en todo momento hasta el fin del mundo. Entonces Él está allí esperando responder tan pronto como le pidamos ayuda.
En los Archivos del Apostolado de la Oración (AOP) en Toulouse, (ahora conocida como la Red Mundial de Oración del Papa PWPN), la solicitud de la adolescente Therese Martin para la membresía se considera uno de sus tesoros más preciados. Como millones de personas desde que se fundó el AOP en 1845, Therese "ofreció todas sus oraciones, obras, alegría y sufrimiento de cada día" por todas las intenciones del Sagrado Corazón y especialmente por las intenciones de Nuestro Santo Padre, el Papa.


ORACIÓN DE NOVENA
Señor Jesús que una vez dijiste, pregunta y recibirás, busca y encontrarás, toca y se te abrirá la puerta. Vengo ante ustedes hoy con fe en sus palabras, esperanza en sus promesas y amor por su Sagrado Corazón. Otorgue el favor que le pido en esta Novena 
( aquí mencione su solicitud ). 
Pero si lo que pido no es por tu Gloria o por el bien de mi alma, obtén para mí lo que sea más propicio para ambos. Amén.
Nuestro Padre …………… .. Salve María ………………. Gloria al Padre, etc.

DIA NUEVE
DÍA NUEVE: NOVENA EN HONOR DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS
PATRONES: SANTA FAUSTINA KOWALSKA: FIESTA 5 DE OCTUBRE Y  PAPA SAN JUAN PABLO 11: FIESTA 22 DE OCTUBRE

Faustina Kowalska murió en 1938. La primera santa del Nuevo Milenio fue honrada en 2000 por otro nativo de Polonia, el Papa, más tarde San Juan Pablo II. Como consecuencia de las revelaciones divinas que le otorgó durante su corta vida (murió a los 33 años), el primer domingo después de Pascua ahora se celebra en la Iglesia Universal como la fiesta de la Divina Misericordia.
El establecimiento de una nueva Fiesta en honor a Nuestro Salvador, Jesucristo, es un evento raro en la vida de la Iglesia. Solo ha habido cuatro en los últimos 1000 años: Corpus Christi en 1264; El Sagrado Corazón en 1856, Cristo Rey en 1925 y ahora la Divina Misericordia en 2000. Estas fiestas se remontan a revelaciones privadas a individuos, principalmente a mujeres santas. Sin embargo, no agregan nada nuevo a lo que se revela en las Escrituras. Lo que hacen es pedir un nuevo énfasis en algún aspecto de la revelación que se está descuidando o infravalorando en un período determinado de la historia. Los extensos diarios de Santa Faustina contienen infinitas palabras de aliento como: "Almas, no le tengan miedo a Dios, sino confíen en Él, porque Él es bueno y su misericordia es eterna".
“La humanidad nunca encontrará la paz hasta que se convierta con confianza en la Divina Misericordia. ¡Divina Misericordia! Este es el regalo de Pascua que la Iglesia recibe de Cristo resucitado y ofrece a la humanidad ”. Estas palabras del Papa San Juan Pablo, cuando instituyó la Fiesta de la Divina Misericordia, continuarán resonando en los siglos venideros. Nuestro Salvador sabe cómo usted, su familia, su nación y cualquier otra nación anhelan la paz. Siempre se nos escapará a menos que lo busquemos y lo encontremos en el único lugar donde se puede encontrar: el Corazón del Creador y Salvador del Mundo. "En su voluntad está nuestra paz" (Dante Alighieri).



ORACIÓN DE NOVENA 
Señor Jesús que una vez dijiste, pregunta y recibirás, busca y encontrarás, toca y la puerta se te abrirá. Vengo ante ustedes hoy con fe en sus palabras, esperanza en sus promesas y amor por su Sagrado Corazón. Otorgue el favor que le pido en esta Novena
 ( aquí mencione su solicitud ). 
Pero si lo que pido no es para tu gloria o el bien de mi alma, obtén para mí lo que sea más propicio para ambos. Amén.
Padre nuestro .......... Dios te salve ......... Gloria al Padre, etc.
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...