miércoles, 24 de enero de 2018

EL EVANGELIO DE HOY MIÉRCOLES 24 ENERO 2018


Lecturas de hoy Miércoles de la 3ª semana del Tiempo Ordinario
Hoy, miércoles, 24 de enero de 2018



Primera lectura
Lectura del segundo libro de Samuel (7,4-17):

En aquellos días, recibió Natán la siguiente palabra del Señor: «Ve y dile a mi siervo David: "Así dice el Señor: ¿Eres tú quien me va a construir una casa para que habite en ella? Desde el día en que saqué a los israelitas de Egipto hasta hoy, no he habitado en una casa, sino que he viajado de acá para allá en una tienda que me servía de santuario. Y, en todo el tiempo que viajé de acá para allá con los israelitas, ¿encargué acaso a algún juez de Israel, a los que mandé pastorear a mi pueblo Israel, que me construyese una casa de cedro?" Pues bien, di esto a mi siervo David: "Así dice el Señor de los ejércitos: Yo te saqué de los apriscos, de andar tras las ovejas, para que fueras jefe de mi pueblo Israel. Yo estaré contigo en todas tus empresas, acabaré con tus enemigos, te haré famoso como a los más famosos de la tierra. Daré un puesto a Israel, mi pueblo: lo plantaré para que viva en él sin sobresaltos, y en adelante no permitiré que los malvados lo aflijan como antes, cuando nombré jueces para gobernar a mi pueblo Israel. Te pondré en paz con todos tus enemigos, y, además, el Señor te comunica que te dará una dinastía. Y, cuando tus días se hayan cumplido y te acuestes con tus padres, afirmaré después de ti la descendencia que saldrá de tus entrañas, y consolidaré su realeza. Él construirá una casa para mi nombre, y yo consolidaré el trono de su realeza para siempre. Yo seré para él padre, y él será para mí hijo; si se tuerce, lo corregiré con varas y golpes como suelen los hombres, pero no le retiraré mi lealtad como se la retiré a Saúl, al que aparté de mi presencia. Tu casa y tu reino durarán por siempre en mi presencia; tu trono permanecerá por siempre."» 
Natán comunicó a David toda la visión y todas estas palabras.

Palabra de Dios

Salmo
Sal 88,4-5.27-28.29-30

R/. Le mantendré eternamente mi favor

Sellé una alianza con mi elegido, 
jurando a David, mi siervo: 
«Te fundaré un linaje perpetuo, 
edificaré tu trono para todas las edades.» R/. 

«Él me invocará: "Tú eres mi padre, 
mi Dios, mi Roca salvadora"; 
y yo lo nombraré mi primogénito, 
excelso entre los reyes de la tierra.» R/.

«Le mantendré eternamente mi favor, 
y mi alianza con él será estable; 
le daré una prosperidad perpetua 
y un trono duradero como el cielo.» R/.


Evangelio de hoy
Lectura del santo evangelio según san Marcos (4,1-20):

En aquel tiempo, Jesús se puso a enseñar otra vez junto al lago. Acudió un gentío tan enorme que tuvo que subirse a una barca; se sentó, y el gentío se quedó en la orilla. 
Les enseñó mucho rato con parábolas, como él solía enseñar: «Escuchad: Salió el sembrador a sembrar; al sembrar, algo cayó al borde del camino, vinieron los pájaros y se lo comieron. Otro poco cayó en terreno pedregoso, donde apenas tenía tierra; como la tierra no era profunda, brotó en seguida; pero, en cuanto salió el sol, se abrasó y, por falta de raíz, se secó. Otro poco cayó entre zarzas; las zarzas crecieron, lo ahogaron, y no dio grano. El resto cayó en tierra buena: nació, creció y dio grano; y la cosecha fue del treinta o del sesenta o del ciento por uno.» 
Y añadió: «El que tenga oídos para oír, que oiga.»
Cuando se quedó solo, los que estaban alrededor y los Doce le preguntaban el sentido de las parábolas.
Él les dijo: «A vosotros se os han comunicado los secretos del reino de Dios; en cambio, a los de fuera todo se les presenta en parábolas, para que, por más que miren, no vean, por más que oigan, no entiendan, no sea que se conviertan y los perdonen."» 
Y añadió: «¿No entendéis esta parábola? ¿Pues, cómo vais a entender las demás? El sembrador siembra la palabra. Hay unos que están al borde del camino donde se siembra la palabra; pero, en cuanto la escuchan, viene Satanás y se lleva la palabra sembrada en ellos. Hay otros que reciben la simiente como terreno pedregoso; al escucharla, la acogen con alegría, pero no tienen raíces, son inconstantes y, cuando viene una dificultad o persecución por la palabra, en seguida sucumben. Hay otros que reciben la simiente entre zarzas; éstos son los que escuchan la palabra, pero los afanes de la vida, la seducción de las riquezas y el deseo de todo lo demás los invaden, ahogan la palabra, y se queda estéril. Los otros son los que reciben la simiente en tierra buena; escuchan la palabra, la aceptan y dan una cosecha del treinta o del sesenta o del ciento por uno.»

Palabra del Señor



Comentario al Evangelio de hoy miércoles, 24 de enero de 2018
Severiano Blanco, cmf
Queridos hermanos:

Algún experto ha dicho que la parábola de hoy debería llamarse “del sembrador impertérrito”. Efectivamente hace falta tener moral para, después de tanto fracaso, continuar esparciendo semillas, en una geografía en la que, por un agente u otro,  termina secándose o siendo devorada. Pero, gracias a ese tesón, la semilla finalmente “siente la caricia del terruño y abre sus entrañas a la vida”, según celebra la conocida zarzuela.

Jesús debió de decir esta parábola a gente desencantada, que le tildaba de ingenuo y le invitaba a abrir los ojos: ¿no te das cuenta, Maestro, de que cada uno está a lo que está? ¿de que ese asunto del Reino te interesa a ti y cuatro infelices más? ¿de que te persiguen las autoridades religiosas y las civiles? ¿de que entre tus mismos seguidores hay más envidiejas y ambición que concordia? A pesar de tan “razonables” advertencias, Jesús siguió sembrando esperanzado.

La parábola del sembrador está emparentada con las de la levadura y del grano de mostaza; son las designadas como “parábolas del contraste”: en algo aparentemente insignificante se encierra un potencial increíble. “Demos tiempo al tiempo”, suele decirse.

A la parábola sigue una explicación, probablemente no original de Jesús, cuyo lenguaje era suficientemente claro, sino de la Iglesia primitiva. La existencia de esta Iglesia es la demostración de que los afanes de Jesús no fueron vanos; ella es su fruto. Pero un fruto no exento de riesgos de malograrse. Hay creyentes “despistados”, olvidadizos, o tan ocupados en otros asuntos que su fe puede terminar desvitalizándose, asfixiada en el barullo de lo intranscendente, frívolo, o, sencillamente, secundario, que ha logrado ocupar el puesto principal. Llamadas muy oportuna. ¿Dónde fijo yo la atención?

Entre parábola y explicación (o aplicación) hay un texto difícil. Una traducción defectuosa de la lengua de Jesús al griego acaba dejándonos la impresión de que Jesús tuviese mala intención para con algunos: “no sea que se conviertan y se les perdone” (!!!). Muy probablemente quiso decir: “todo les resulta un enigma (en vez de parábola), salvo que cambien de actitud…”. Es decir, lo de Jesús resulta ininteligible para quien se sitúa deliberadamente “fuera”, para quien se hace el escéptico y se queda a la expectativa. Además de inteligencia requiere empatía, candor de corazón, cercanía… A Jesús le entienden los seguidores; dar explicaciones a endurecidos es perder el tiempo. El marinero del romance medieval decía: “yo no digo esa canción sino a quien conmigo va”.

Vuestro hermano
Severiano Blanco cmf

BUENOS DÍAS

martes, 23 de enero de 2018

EL ESPÍRITU SANTO Y MARÍA


Espíritu Santo y María
El Padre Nicolás nos invita a reflexionar sobre la relación entre el Espíritu Santo y la Virgen María.


Por: Padre Nicolás Schwizer | Fuente: Retiros y homilías del Padre Nicolás Schwizer 




Quisiera meditar con Uds. algunos momentos en la vida de María.

La Encarnación. No hay duda de que la vida de la Sma. Virgen estaba, desde su inicio, bajo la fuerte influencia del Espíritu de Dios. La Virgen es la “Todasanta” porque desde el primer momento de su existencia fue “sagrario del Espíritu Santo”.

Pero su gran encuentro con el Espíritu fue la Anunciación del ángel que culminó con la encarnación. Allí María tuvo su primer Pentecostés: “El Espíritu Santo descenderá sobre ti y el Poder del Altísimo te cubrirá con su sombra” (Lc 1, 35). A partir de ese acontecimiento, Ella es llamada sagrario, tabernáculo, santuario del Espíritu. Con ello se indica la inhabitación del Espíritu Santo en María de un modo del todo singular y superior al de los demás cristianos. Como en todo ser humano, el Espíritu de santidad quiere actuar en la Virgen y a través de Ella.

Pero aquí hay algo más, algo nuevo y único: el Espíritu Santo quiere actuar junto con la Virgen. ¿Y para qué? Quiere unirse y atarse a María para que de Ella nazca Jesucristo, el Hijo de Dios. Y quiere que la Sma. Virgen diga su Sí totalmente voluntario y libre, para entregarse al Espíritu de Dios, para convertirse en Madre de Dios.

Su crecer en el orden del Espíritu. No debemos pensar que la Virgen haya entendido todo desde el primer momento. Evidentemente comprendió mucho más que nosotros. Porque tenía, como dice Santo Tomas de Aquino, la luz profética que le regaló un conocimiento mayor de las cosas de Dios.

Sin embargo, como ser humano, Ella crecía en sabiduría y desarrollaba su entendimiento a lo largo de la vida. Por eso dice el Padre Kentenich, fundador del Movimiento de Schoenstatt, que María iba adentrándose crecientemente en el orden del Espíritu.

¿Y que quiere decir eso? María tenía que ir comprendiendo, paso a paso, lo que quería Jesús y lo que debía hacer Ella a su lado. Tenía que entrar progresivamente en ese mundo de su Hijo Divino, en el que sólo el Espíritu Santo podía introducirla.

En diálogo con el Espíritu de Dios, tenía que recorrer su propio camino de fe. Pensemos en la pérdida de Jesús, al cumplir los doce años. Cuan difícil fue para Ella cuando su Hijo los abandonó y después les dijo:

“¿No saben que tengo que preocuparme de los asuntos de mi padre?” (Lc 2, 49). Como agrega el texto, María no entendió lo que Jesús acababa de decirles. Pero seguramente se dio cuenta de que su Hijo llevaba en su interior otro mundo, el mundo del Padre, en el cual también Ella tenía que adentrarse de un modo más perfecto.

Otro momento difícil surgió en las bodas de Cana. “Mujer, Tú no piensas como yo: todavía no ha llegado mi hora” (Jn 2.4). El pensar de María es todavía muy humana: quiere ayudar a los novios en su necesidad. Jesús mira más allá, piensa en su gran Hora, la hora de la Cruz. Y, sin embargo, cumple el deseo de su Madre.

Y cuando llegó la gran Hora, sobre el monte Calvario, ya callan en Ella los deseos y necesidades naturales. Todo queda sujeto a la voluntad del Padre. Ya no quiere otra cosa que cumplir perfectamente con su rol en el plan de salvación.

Cumbre de ese insertarse en el orden del Espíritu fue la espera de Pentecostés. Allí María se convirtió en instrumento perfecto del Espíritu Santo. Condujo a los apóstoles y discípulos a la sala del Cenáculo. Les transmitió su anhelo profundo por el Espíritu Divino. E imploró con ellos la fuerza de lo alto sobre toda la Iglesia reunida.

En Pentecostés se colmó su ansia por el Espíritu de Dios. Allí quedó completamente compenetrada y transformada por El. Ya en su vida tuvo un cuerpo espiritualizado, es decir, transformado por el Espíritu, de modo que no podía ser destruido. Y así ya quedó preparada para su último y definitivo paso: la asunción en cuerpo y alma al cielo.

Creo que también en nuestra propia vida debe existir un insertarnos paulatinamente en el orden del Espíritu.

Preguntas para la reflexión
1. ¿ Cómo cultivo mi relación con el ES?
2. ¿Sentimos cómo el Espíritu Santo nos capta e introduce en el mundo de Dios?
3. ¿Es la Virgen mi compañera en la oración?

EL EVANGELIO DE HOY MARTES 23 ENERO 2018

Lecturas de hoy Martes de la 3ª semana del Tiempo Ordinario
Hoy, martes, 23 de enero de 2018



Primera lectura
Lectura del segundo libro de Samuel (6,12b-15.17-19):

En aquellos días, fue David y llevó el arca de Dios desde la casa de Obededom a la Ciudad de David, haciendo fiesta. Cuando los portadores del arca del Señor avanzaron seis pasos, sacrificó un toro y un ternero cebado. E iba danzando ante el Señor con todo entusiasmo, vestido sólo con un roquete de lino. Así iban llevando David y los israelitas el arca del Señor entre vítores y al sonido de las trompetas. Metieron el arca del Señor y la instalaron en su sitio, en el centro de la tienda que David le había preparado. David ofreció holocaustos y sacrificios de comunión al Señor y, cuando terminó de ofrecerlos, bendijo al pueblo en el nombre del Señor de los ejércitos; luego repartió a todos, hombres y mujeres de la multitud israelita, un bollo de pan, una tajada de carne y un pastel de uvas pasas a cada uno. Después se marcharon todos, cada cual a su casa.

Palabra de Dios

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Salmo
Sal 23,7.8.9.10

R/. ¿Quién es ese Rey de la gloria?
Es el Señor en persona

¡Portones!, alzad los dinteles,
que se alcen las antiguas compuertas:
va a entrar el Rey de la gloria. R/.

¿Quién es ese Rey de la gloria?
El Señor, héroe valeroso;
el Señor, héroe de la guerra. R/.

¡Portones!, alzad los dinteles,
que se alcen las antiguas compuertas:
va a entrar el Rey de la gloria. R/.

¿Quién es ese Rey de la gloria?
El Señor, Dios de los ejércitos.
Él es el Rey de la gloria. R/.

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Evangelio de hoy
Lectura del santo evangelio según san Marcos (3,31-35):

En aquel tiempo, llegaron la madre y los hermanos de Jesús y desde fuera lo mandaron llamar.
La gente que tenía sentada alrededor le dijo: «Mira, tu madre y tus hermanos están fuera y te buscan.»
Les contestó: «¿Quiénes son mi madre y mis hermanos?»
Y, paseando la mirada por el corro, dijo: «Éstos son mi madre y mis hermanos. El que cumple la voluntad de Dios, ése es mi hermano y mi hermana y mi madre.»

Palabra del Señor

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Comentario al Evangelio de hoy martes, 23 de enero de 2018
Severiano Blanco, cmf


Queridos hermanos:

En la época de Jesús no se estilaba la emancipación de los hijos solteros, tan típica de las sociedades occidentales modernas (si las crisis económicas no lo impiden). Por eso, este desaire de Jesús hacia su familia tuvo que resultar llamativo, quizá escandaloso. Sus oyentes conocían bien el mandamiento “honra a tu padre y a tu madre”, y pertenecían a una cultura en la que los lazos familiares eran mucho más fuerte que en la nuestra. Jesús tuvo que desconcertar. Y tal vez el evangelista Marcos quiso acentuar el desconcierto: en un párrafo tan breve, afirma hasta dos veces que los parientes de Jesús “están fuera”. ¿Querrá insinuar que están “fuera de órbita”, que en relación con Jesús no se enteran de la misa la media, que el parentesco carnal no ayuda? Algo muy extraño en ese momento.

Existe toda una veta de la tradición evangélica que carga las tintas contra la familia de Jesús. En este mismo evangelio, un par de páginas más atrás, escribe el autor que “los suyos salieron a llevárselo porque decían: está fuera de sí” (Mc 2,20). ¿Se sentirían quizá avergonzados de él, de su extraño estilo de vida? Y el cuarto evangelio nos informa sin tapujos de que “ni sus hermanos creían en él” (Jn 7,5) [no entramos ahora en el espinoso asunto del parentesco de estos “hermanos” con Jesús, asunto quizá carente de interés para los evangelistas, que no se molestaron en aclarárnoslo].

En Jesús todo resulta novedoso. Su convicción de que entramos en una nueva época de la historia le lleva a relativizar tradiciones e instituciones. No descalifica el pasado religioso de su pueblo, y menos aún el Decálogo, pero afirma que el Reino es una fuerza tan poderosa que, si se lo acoge, puede hacer estallar los modelos “de siempre”, abriendo a otras posibilidades. “Si uno está en Cristo es una criatura nueva” (2Co 5,17).

Jesús tuvo la amarga experiencia de familias carnales que entorpecieron a algunos el alistarse en su seguimiento. Uno lo pospuso con este simple pretexto: “déjame antes despedirme de los de mi casa” (Lc 9,61); a otros tuvo que decirles: “no llaméis padre vuestro a nadie en la tierra; uno solo es vuestro Padre, el del cielo” (Mt 23,9).

Jesús quiso que sus seguidores viviesen realmente como hermanos, formando una nueva familia, manifestada particularmente en el compartir la mesa, figura proléptica del Reino que veía despuntar: un banquete abierto, sin exclusiones por motivo de desprestigio social o de “impureza” legal (publicanos, prostitutas…). Y esa “nueva” familia ofrecería correctivos a la tradicional: nadie sería el “padre”, el que exige ser servido, sino que todos serían los criados de todos: “Yo estoy en medio de vosotros como el que sirve” (Lc 22,27).

¿Podremos nosotros, desde nuestras comunidades parroquiales o religiosas, ofrecer a creyentes o no creyentes de hoy una forma de “familia” más atrayente, interpelante, capaz  de enriquecer a la “normal” experiencia familiar? La contemplación de Jesús con los suyos, la escucha de su palabra, ¿podrán ser hoy una medicina para tantas familias frustradas, desestructuradas o en peligro de ruptura?

Vuestro hermano
Severiano Blanco cmf

BUENOS DÍAS


lunes, 22 de enero de 2018

LOS CINCO MINUTOS DE JESÚS, 22 ENERO


LOS CINCO MINUTOS DE JESÚS
22 de enero




Felices los que trabajan por la paz, porque serán llamados hijos de Dios. Es que no basta ser pacífico; es preciso trabajar por la instauración de la paz entre los hombres, en el mundo entero.

Trabajar por la paz es establecer a aquellas condiciones de vida que hagan a cada hombre feliz, seguro de sí mismo y de su porvenir; es suavizar relaciones humanas, solucionar problemas, crear a nuestro alrededor un clima de comprensión, dar a casa uno lo suyo, respetando el derecho de todos.


* P. Alfonso Milagro

EL EVANGELIO DE HOY LUNES 22 ENERO 2018


Lecturas de hoy Lunes de la 3ª semana del Tiempo Ordinario
 Hoy, lunes, 22 de enero de 2018



Primera lectura
Lectura del segundo libro de Samuel (5,1-7.10):

En aquellos días, todas las tribus de Israel fueron a Hebrón a ver a David y le dijeron: «Hueso tuyo y carne tuya somos: ya hace tiempo, cuando todavía Saúl era nuestro rey, eras tú quien dirigías las entradas y salidas de Israel. Además el Señor te ha prometido: "Tú serás el pastor de mi pueblo Israel, tu serás el jefe de Israel."»
Todos los ancianos de Israel fueron a Hebrón a ver al rey, y el rey David hizo con ellos un pacto en Hebrón, en presencia del Señor, y ellos ungieron a David como rey de Israel. Tenía treinta años cuando empezó a reinar, y reinó cuarenta años; en Hebrón reinó sobre Judá siete años y medio, y en Jerusalén reinó treinta y tres años sobre Israel y Judá. El rey y sus hombres marcharon sobre Jerusalén, contra los jebuseos que habitaban el país.
Los jebuseos dijeron a David: «No entrarás aquí. Te rechazarán los ciegos y los cojos.»
Era una manera de decir que David no entraría. Pero David conquistó el alcázar de Sión, o sea, la llamada Ciudad de David. David iba creciendo en poderío, y el Señor de los ejércitos estaba con él.

Palabra de Dios


Salmo
Sal 88,20.21-22.25-26

R/. Mi fidelidad y misericordia lo acompañarán

Un dia hablaste en visión a tus amigos:
«He ceñido la corona a un héroe,
he levantado a un soldado sobre el pueblo.» R/.

«Encontré a David, mi siervo,
y lo he ungido con óleo sagrado;
para que mi mano esté siempre con él
y mi brazo lo haga valeroso.» R/.

«Mi fidelidad y misericordia lo acompañarán,
por mi nombre crecerá su poder:
extenderé su izquierda hasta el mar,
y su derecha hasta el Gran Río.» R/.


Evangelio de hoy
Lectura del santo evangelio según san Marcos (3,22-30):

En aquel tiempo, los escribas que habían bajado de Jerusalén decían: «Tiene dentro a Belzebú y expulsa a los demonios con el poder del jefe de los demonios.»
Él los invitó a acercarse y les puso estas parábolas: «¿Cómo va a echar Satanás a Satanás? Un reino en guerra civil no puede subsistir; una familia dividida no puede subsistir. Si Satanás se rebela contra sí mismo, para hacerse la guerra, no puede subsistir, está perdido. Nadie puede meterse en casa de un hombre forzudo para arramblar con su ajuar, si primero no lo ata; entonces podrá arramblar con la casa. Creedme, todo se les podrá perdonar a los hombres: los pecados y cualquier blasfemia que digan; pero el que blasfeme contra el Espíritu Santo no tendrá perdón jamás, cargará con su pecado para siempre.»
Se refería a los que decían que tenía dentro un espíritu inmundo.

Palabra del Señor



Comentario al Evangelio de hoy lunes, 22 de enero de 2018
Severiano Blanco, cmf
Queridos hermanos:

La búsqueda de causas sobrenaturales como explicación de cuanto nuestra inteligencia no puede abarcar por completo tiene todos los visos de una fe humilde, que por ese camino puede encontrar a Dios en cada rincón de la existencia. Pero tiene también sus riesgos, pues puede llevarnos a escamotear las propias responsabilidades en la marcha del mundo. Hace ya 52 años, el Vaticano II hablaba de la “autonomía de las realidades terrenas” (GS 36) y de la responsabilidad humana en conducirlas a buen fin (GS 31).

La puesta en guardia frente a un excesivo “sobrenaturalismo” no es nada nuevo. Los medievales hablaban ya de las “causas segundas”, evitando así atribuir directamente a Dios (“causa primera”), o, en negativo, a Satanás, cuanto sucede en el mundo. Es un trabajo de interpretación de la realidad que aparece ya en la Escritura. La carta de Santiago aboga por que las tentaciones no se atribuyan a Dios y ni al diablo, sino “a las propias concupiscencias de cada uno” (Sant 1,13); con ello invita al dominio propio, en vez de resignarnos a ser constante presa de poderes extraños o sobrenaturales. Y el evangelista Mateo, ante un caso de supuesta posesión diabólica (cf. Mc 9,17), habla de influjo de la luna sobre el estado de ánimo de un joven (Mt 17,15). Interesante sugerencia…

Ciertamente la mentalidad dominante en la época de Jesús era otra, no secular sino “mítica”: el mundo sería conducido por poderes extraños a él, sobrenaturales. Era la idea corriente en la antigüedad, no específicamente cristiana, y que estamos llamados a superar (sin cerrarnos a eventuales intervenciones del sobrenatural: Dios sigue siendo Dios).

No creo posible decir una palabra definitiva sobre la naturaleza de los exorcismos (=expulsión de demonios) realizados por Jesús. Se trate de posesiones diabólicas o de otras psicopatías, hay algo indiscutible: muchas personas que se acercaron a él recobraron su salud mental y su paz interior; fue cercanía sanadora. Y fue una visualización del mensaje evangélico: Dios desea el bien del hombre; cuando viene su Reino, el mal retrocede. El poder de Dios es “más fuerte” que “lo fuerte” del mal de este mundo. Jesús nos lo explica hoy con una parábola elemental, comprensible a todos.

Nuestro pasaje evangélico es, en su conjunto, un enérgico reproche a quienes optan por la ceguera, a quienes buscan explicaciones retorcidas con tal de no reconocer el poder y autoridad de Jesús. Pecan contra la luz, contra el Espíritu Santo, lo que equivale a situarse deliberadamente al margen de su acción salvífica. No es que deje de ofrecérseles el perdón, sino que, en su inmovilista y autosuficiente soberbia, huyen de la salvación.

Ojalá, sin caer en absurda credulidad (superstición) y conscientes de nuestra autonomía y responsabilidad en la marcha de la historia, tengamos al mismo tiempo un corazón humilde, siempre abierto a la sorpresa de la acción sanadora y creadora de Jesús, especialmente cuando se nos acerca en su Palabra y en sus Sacramentos.

Vuestro hermano
Severiano Blanco cmf

BUENOS DÍAS




domingo, 21 de enero de 2018

PAPA FRANCISCO EN PERÚ CORONA A LA VIRGEN DE LA PUERTA COMO MADRE DE MISERICORDIA Y LA ESPERANZA


El Papa en Perú corona a la Virgen de la Puerta como Madre de Misericordia y la Esperanza
POR MARÍA XIMENA RONDÓN
El Papa Francisco corona a la Virgen de la Puerta / Foto: Captura YouTube


(ACI).- El Papa Francisco coronó a la Virgen de la Puerta y la declaró Madre de la Misericordia y la Esperanza, durante la celebración mariana que presidió este sábado 20 de enero en la Plaza de Armas de Trujillo.

“Sé del amor que le tienen a la Inmaculada Virgen de la Puerta de Otuzco que hoy junto a ustedes, quiero declarar: Virgen de la Puerta, ‘Madre de Misericordia y de la Esperanza’”, afirmó el Pontífice.

La corona fue llevada ante el Santo Padre por dos jóvenes y después de bendecirla y recitar una oración, la colocó y puso un Rosario en las manos de la imagen.

Después un grupo de niños llevó ofrendas florales que colocaron a los pies de la imagen y los presentes recitaron las letanías de la Santísima Virgen.


El Papa San Juan Pablo II coronó a la Virgen de la Puerta como Reina de la Paz Mundial el 4 de febrero de 1985 cuando visitó la ciudad peruana de Trujillo.

La Virgen de la Puerta es una de las devociones marianas más importantes y queridas de Perú. Su santuario se encuentra en Otuzco, a 75 kilómetros al este de Trujillo. Comenzó a ser venerada desde el siglo VII y es considerada la patrona del norte del país.

Historia de la Virgen de la Puerta

En 1674 una flota de piratas holandeses se acercaba a Trujillo para robar, luego de haber causado estragos en Guayaquil, en el actual Ecuador, y en Zaña, en la costa norte de Perú. Los pobladores se preocuparon y enviaron emisarios a todos los pueblos de la zona para advertir del peligro, incluyendo la localidad de Otuzco, en la sierra del actual departamento de La Libertad, en Perú.

Los pobladores de Otuzco, ante el peligro, decidieron colocar una imagen de la Virgen de la Concepción en la puerta de entrada a la ciudad. Durante 3 días rezaron a la Madre de Dios para que evitara el ingreso de los piratas que ni siquiera llegaron a desembarcar.


Esto fue tomado como un milagro ya que no existió explicación alguna para el hecho, y los pobladores de Otuzco decidieron levantar en el lugar en donde estaba la imagen un santuario dedicado a la Virgen de la Puerta.

El entonces Obispo de Trujillo, Mons. Juan de la Calle y Heredia, hizo oficial la celebración de la Virgen de la Puerta.

Actualmente, las celebraciones se inician con una novena entre el 4 y el 12 de diciembre. El día 13 es conocido como el "Día de Alba", mientras que el día 14 es el "Día de Doces" o "Día de la Bajada" de la imagen de la Virgen. El día 15 se realiza la celebración central.

PAPA FRANCISCO EN PERÚ: MARÍA ES LA PUERTA DE MISERICORDIA QUE NOS LLEVA A JESÚS


El Papa en Perú: María es la puerta de Misericordia que nos lleva a Jesús

El Papa en la celebración mariana en la Plaza de Armas de Trujillo. Captura Youtube



(ACI).- Luego de su encuentro con sacerdotes, religiosos y seminaristas, el Papa Francisco presidió una celebración mariana en la Plaza de Armas de Trujillo en la que reconoció a la Virgen de la Puerta de Otuzco como “Madre de Misericordia y de la Esperanza”.

“Ella nos sigue defendiendo e indicando la Puerta que nos abre el camino a la vida auténtica, a la Vida que no se marchita. Ella es la que sabe acompañar a cada uno de sus hijos para que vuelvan a casa. Nos acompaña y lleva hasta la Puerta que da Vida porque Jesús no quiere que nadie se quede afuera, a la intemperie”, dijo el Papa este sábado 20 de enero.

Iniciado el evento, el primero en tomar la palabra fue el Arzobispo de Trujillo, Mons. Miguel Cabrejos, quien dio la bienvenida a Papa y expresó el amor que, junto al pueblo, le tiene “a la Madre de Jesús y Madre nuestra, en esta bendita advocación de la ‘Inmaculada Virgen de la Puerta de Otuzco’”.

“Gracias por engalanar esta bendita imagen que acompaña la fe de muchísimos fieles en Trujillo y en el Perú con el título de ‘Madre de Misericordia y de Esperanza’”, expresó el Prelado.

Más adelante, en su discurso, el Papa Francisco calificó a la plaza como “un santuario a cielo abierto en el que todos queremos dejarnos mirar por la Madre, por su maternal y tierna mirada”.


Asimismo, hizo un repaso de todas las imágenes religiosas reunidas en la plaza, provenientes desde diferentes ciudades de la región de La Libertad.

Entre estas se encontraban algunas como la Santísima Cruz de Chalpón de Chiclayo, al Señor Cautivo de Ayabaca, la Virgen de las Mercedes de Paita, el Divino Niño del Milagro de Eten o la Virgen Dolorosa de Cajamarca.

Luego, dijo que Dios busca “la forma de acercarse a cada uno de la manera que pueda recibirlo y así nacen las más distintas advocaciones”.

“Expresan el deseo de nuestro Dios por querer estar cerca de cada corazón porque el idioma del amor de Dios siempre se pronuncia en dialecto, no tiene otra forma de hacerlo, y además resulta esperanzador ver cómo la Madre asume los rasgos de los hijos, la vestimenta, el dialecto de los suyos para hacerlos parte de su bendición”, añadió.

En ese sentido, aseguró que “María siempre será una Madre mestiza, porque en su corazón encuentran lugar todas las sangres.

Tras estas palabras declaró a la Inmaculada Virgen de la Puerta de Otuzco como “Madre de Misericordia y de la Esperanza”.

“Ella nos indica el camino a casa, ella nos lleva a Jesús que es la Puerta de la Misericordia”, prosiguió.

Antes de terminar su discurso, pidió pensar en las madres y abuelas, que “son verdadera fuerza motora de la vida y de las familias del Perú”.


“El amor a María nos tiene que ayudar a generar actitudes de reconocimiento y gratitud frente a la mujer, frente a nuestras madres y abuelas que son un bastión en las vidas de nuestras ciudades. Casi siempre silenciosas llevan la vida adelante”, reconoció el Pontífice.

En ese contexto, exhortó luchar contra la “plaga” del feminicidio que afecta el continente americano.

Finalmente, el Papa dijo que la Virgen de la puerta “muestra el camino y nos señala la mejor defensa contra el mal de la indiferencia y la insensibilidad”.

“Ella nos lleva a su Hijo y así nos invita a promover e irradiar una cultura de la misericordia, basada en el redescubrimiento del encuentro con los demás”, concluyó.

Al final del evento, el Santo Padre coronó a la Virgen de la Puerta como Madre de la Misericordia y la Esperanza.

LOS CINCO MINUTOS DE JESÚS, 21 ENERO


LOS CINCO MINUTOS DE JESÚS
21 de enero


Felices los que tienen un corazón recto, porque verán a Dios. Es difícil poder afirmar con verdad que tenemos el corazón recto.

Hay nuestro corazón una carga de soberbia y de agresividad que, con frecuencia, se manifiesta en nuestro modo de proceder y en el trato con los demás.

En cambio, los que tienen el corazón recto, los que son sencillos de corazón, los que no tienen malicia ni la suponen en los demás, los que son de corazón limpio y que con limpieza ven todas las cosas, ellos son los que verán a Dios.


* P. Alfonso Milagro 

LOS CINCO MINUTOS DE JESÚS, 20 ENERO


LOS CINCO MINUTOS DE JESÚS
20 de enero


Felices los misericordiosos, porque obtendrán misericordia. La misericordia es fruto de un corazón tierno y compasivo, que sabe sufrir con los que sufren y llorar con los que lloran y afligirse con los que tienen alguna pena.

Ser misericordioso es volvar un poco de dulzura en el corazón amargado, derramar algo de bálsamo en el ánimo abatido y comunicarle nuevas fuerzas, para ir repechando el camino del deber.

Ser misericordioso es consolar al triste, acompañar al que se halla en soledad, dejar que el prójimo vuelque en nosotros sus preocupaciones, que se desahogue de sus aflicciones y opresiones.


* P. Alfonso Milagro

LOS CINCO MINUTOS DE JESÚS, 19 DE ENERO


LOS CINCO MINUTOS DE JESÚS
19 de enero


Felices los que tienen hambre y sed de justicia, porque serán saciados. el hambre y la sed corporal torturan, pero el hambre y la sed de justicia no son menos apremiantes. Todos aquello que desean vivamente que en el mundo se instaure la justicia, sabiendo que es ésa la voluntad de Dios; todos los que de una u otra forma se juegan por la justicia, sobre todo con aquellos que se hallan desamparados, con aquellos que no tienen medios ni influencia para exigir que se les haga justicia; los que defienden la justicia para los pobres, para los oprimidos, para los perseguidos, para los despojados de sus legítimos derechos... todos ellos tienen hambre y sed de justicia y todos ellos serán saciados.

* P. Alfonso Milagro

LOS CINCO MINUTOS DE JESÚS, 18 ENERO


LOS CINCO MINUTOS DE JESÚS
18 de enero


Felices los afligidos, porque serán consolados. Bienaventuranza difícil de comprender, pero que encierra todo un secreto de verdadera felicidad.

Los afligidos, los que llorar, lo sque se sienten deprimidos y angustiados; todos los hombres viven esos momentos amargos en determinadas  circunstancias de la vidad; el dolor físico o el dolor moral se preden de nosotros, atenazan nuestras carnes o se prenden de nuestro espíritu; muerden, desgarran, laceran.

Felices cuantos sufren, porque ellos serán consolados con el consuelo de Dios. Cuando nada en la tierra puede ser un consuelo, es entonces cuando Dios aparece en el espíritu del hombre y lo calam y lo consuela y llega a hacerlo feliz.


* P. Alfonso Milagro 

LOS CINCO MINUTOS DE JESÚS, 17 ENERO


LOS CINCO MINUTOS DE JESÚS
17 de enero


Felices los pacientes, porque recibirán la tierra en herencia. Es la segunda bienaventuranza que Cristo nos promete.

Paciente es quien conserva la calma en medio de las tribulaciones, quien sabe dominarse a sí mismo, pero manteniendo en su interior la serenidad. La paciencia, la aceptación, pero no una aceptación onerosa, angustiante, sino una aceptación de calma, sabiendo que Dios saca bienes de los mismos males, de las mismas lágrimas hace brotar las sonrisas.


* P. Alfonso Milagro

EL EVANGELIO DE HOY DOMINGO 21 ENERO 2018


3º del Tiempo Ordinario – Ciclo B
Domingo 21 de enero de 2017
“Jesús te llama“



Primera lectura
Lectura de la profecía de Jonás (3,1-5.10):
En aquellos días, vino la palabra del Señor sobre Jonás: «Levántate y vete a Nínive, la gran ciudad, y predícale el mensaje que te digo.»
Se levantó Jonás y fue a Nínive, como mandó el Señor. Nínive era una gran ciudad, tres días hacían falta para recorrerla.
Comenzó Jonás a entrar por la ciudad y caminó durante un día, proclamando: «¡Dentro de cuarenta días Nínive será destruida!»
Creyeron en Dios los ninivitas; proclamaron el ayuno y se vistieron de saco, grandes y pequeños.
Y vio Dios sus obras, su conversión de la mala vida; se compadeció y se arrepintió Dios de la catástrofe con que había amenazado a Nínive, y no la ejecutó.

Palabra de Dios



Salmo
Salmo Responsorial: 24,4-5ab.6-7bc.8-9
R/. Señor, enséñame tus caminos

Señor, enséñame tus caminos,
instrúyeme en tus sendas:
haz que camine con lealtad;
enséñame, porque tú eres mi Dios y Salvador. R/.

Recuerda, Señor, que tu ternura
y tu misericordia son eternas;
acuérdate de mí con misericordia,
por tu bondad, Señor. R/.

El Señor es bueno y es recto,
y enseña el camino a los pecadores;
hace caminar a los humildes con rectitud,
enseña su camino a los humildes. R/.


Segunda lectura
Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios (7,29-31):
Digo esto, hermanos: que el momento es apremiante. Queda como solución que los que tienen mujer vivan como si no la tuvieran; los que lloran, como si no lloraran; los que están alegres, como si no lo estuvieran; los que compran, como si no poseyeran; los que negocian en el mundo, como si no disfrutaran de él: porque la representación de este mundo se termina.

Palabra de Dios


Lectura del santo evangelio según san Marcos (1,14-20):


Cuando arrestaron a Juan, Jesús se marchó a Galilea a proclamar el Evangelio de Dios.
Decía: «Se ha cumplido el plazo, está cerca el reino de Dios: convertíos y creed en el Evangelio.»
Pasando junto al lago de Galilea, vio a Simón y a su hermano Andrés, que eran pescadores y estaban echando el copo en el lago.
Jesús les dijo: «Venid conmigo y os haré pescadores de hombres.»
Inmediatamente dejaron las redes y lo siguieron. Un poco más adelante vio a Santiago, hijo de Zebedeo, y a su hermano Juan, que estaban en la barca repasando las redes. Los llamó, dejaron a su padre Zebedeo en la barca con los jornaleros y se marcharon con él.

Palabra del Señor



Evangelio Comentado por:
José Antonio Pagola
Mc 1,14-20

OTRO MUNDO ES POSIBLE
No sabemos con certeza cómo reaccionaron los discípulos del Bautista cuando Herodes Antipas lo encarceló en la fortaleza de Maqueronte. Conocemos la reacción de Jesús. No se quedó en el desierto. Tampoco se refugió entre sus familiares de Nazaret. Comenzó a recorrer las aldeas de Galilea predicando un mensaje original y sorprendente.

El evangelista Marcos lo resume diciendo que «marchó a Galilea proclamando la buena noticia de Dios». Jesús no repite la predicación del Bautista ni habla de su bautismo en el Jordán. Anuncia a Dios como algo nuevo y bueno. Este es su mensaje.

«Se ha cumplido el plazo»

El tiempo de espera que se vive en Israel ha acabado. Ha terminado también el tiempo del Bautista. Con Jesús comienza una era nueva. Dios no quiere dejarnos solos ante nuestros problemas, sufrimientos y desafíos. Quiere construir junto con nosotros un mundo más humano.

«Está llegando el reino de Dios»

Con una audacia desconocida, Jesús sorprende a todos anunciando algo que ningún profeta se había atrevido a declarar: «Ya está aquí Dios, con la fuerza creadora de su justicia, tratando de reinar entre nosotros». Jesús experimenta a Dios como una Presencia buena y amistosa que está buscando abrirse camino entre nosotros para humanizar nuestra vida.

Por eso toda la vida de Jesús es una llamada a la esperanza. Hay alternativa. No es verdad que la historia tenga que discurrir por los caminos de injusticia que le trazan los poderosos de la tierra. Es posible un mundo más justo y fraterno. Podemos modificar la trayectoria de la historia.

«Convertíos»

Ya no es posible vivir como si nada estuviera sucediendo. Dios pide a sus hijos colaboración. Por eso grita Jesús: «Cambiad de manera de pensar y de actuar». Somos las personas las que primero hemos de cambiar. Dios no impone nada por la fuerza, pero está siempre atrayendo nuestras conciencias hacia una vida más humana.

«Creed en esta buena noticia»

Tomadla en serio. Despertad de la indiferencia. Movilizad vuestras energías. Creed que es posible humanizar el mundo. Creed en la fuerza liberadora del Evangelio. Creed que es posible la transformación. Introducid en el mundo la confianza.

¿Qué hemos hecho de este mensaje apasionante de Jesús? ¿Cómo lo hemos podido olvidar? ¿Con qué lo hemos sustituido? ¿En qué nos estamos entreteniendo si lo primero es «buscar el reino de Dios y su justicia»? ¿Cómo podemos vivir tranquilos observando que el proyecto creador de Dios de una tierra llena de paz y de justicia está siendo aniquilado por los hombres?

FELIZ DOMINGO




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