martes, 21 de abril de 2020

IMÁGENES DE ORACIONES DE CONFIANZA AL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS






OBISPOS CONFIARÁN ITALIA A LA VIRGEN MARÍA EN SANTUARIO DONDE SE APARECIÓ


Obispos confiarán Italia a la Virgen María en santuario donde se apareció
POR WALTER SÁNCHEZ SILVA | ACI Prensa
 Crédito: Santuario Santa María del Fonte




En el día de San José Obrero, 1 de mayo e inicio del mes mariano, los obispos de Italia confiarán el país a la Virgen María ante la pandemia del coronavirus, en un santuario donde la Madre de Dios se apareció en el siglo XV.

“La Conferencia Episcopal Italiana (CEI) confía todo el país a la protección de la Madre de Dios como signo de salvación y de esperanza. Lo hará el viernes 1 de mayo a las 21 horas con un momento de oración en la Basílica de Santa María del Fonte (de la Fuente) en Caravaggio, diócesis de Cremona, provincia de Bérgamo”, señala una nota del Episcopado publicada este lunes.

“La elección de la fecha y el lugar es muy simbólica. Mayo es, de hecho, el mes tradicionalmente dedicado a la Virgen, tiempo marcado por la oración del Rosario, por las peregrinaciones a los santuarios, por la necesidad de dirigirse con oraciones especiales para la intercesión de la Virgen”, prosigue el texto.

Por ello, “comenzar este mes con el acto de confiarnos a María, en la situación actual, adquiere un significado muy particular para toda Italia”.

El lugar elegido para este momento de oración, “Caravaggio, situado en la diócesis de Cremona y provincia de Bérgamo, recuerda el sufrimiento y el dolor vividos en una tierra duramente probada por la emergencia sanitaria”.


“A la Virgen, la Iglesia le confía a los enfermos, los operadores sanitarios, los médicos, las familias y los difuntos”, agrega.

“En la fiesta de San José obrero, esposo de María Virgen, confía en particular a los trabajadores, consciente de las preocupaciones y los temores con los que muchos miran al futuro”, concluye la nota.

Los obispos italianos han dispuesto además otorgar otros 2.4 millones de euros para hacer frente el coronavirus. Este dinero será entregado a 5 hospitales en el país, entre ellos la Casa de Alivio del Sufrimiento en San Giovanni Rotondo, donde sirvió el Santo Padre Pío.

Hasta este 20 de abril, los casos de coronavirus llegan ya a casi 179 mil y hay 23.660 fallecidos, de los cuales al menos 110 son sacerdotes.

Apariciones de la Virgen en Caravaggio
Caravaggio está ubicado en la frontera entre Milán, Cremona y Bérgamo, en el norte de Italia. Los venecianos acababan de conquistar esta ciudad a los milaneses y el país se desangraba en guerras.

A las 5:00 p.m. del 26 de mayo de 1432 la Virgen se apareció a Giovannetta, una mujer de 32 años, casada con un hombre de mal carácter, Francisco Varoli, un exsoldado que le pegaba.

Giovannetta vio a una Dama que parecía una reina llena de bondad, que le dijo que no tuviera miedo y que se arrodillase para recibir un gran mensaje: "He conseguido aplazar para el pueblo cristiano los merecidos e inminentes castigos de la Justicia Divina, y vengo a anunciar la paz".

Pidió al pueblo hacer penitencia, ayunar los viernes e ir a rezar a la iglesia los sábados por la tarde en agradecimiento. También pidió que se construyera una capilla. Como señal de las bendiciones que habría en el lugar, brotó una fuente que aún hoy existe en Caravaggio. El santuario italiano se llama oficialmente Santa María del Fonte (de la Fuente).

Giovannetta fue a ver al duque de Milán, Felipe Maria Visconti y al maestre de Caravaggio, Marcos Secco, para pedir que acordaran la paz, cosa que finalmente sucedió.

Giovannetta llevaba botellas de agua bendita de la fuente de la Virgen con la que se curaban enfermos y que confirmaban la acción divina que respaldaba sus peticiones.

Más información AQUÍ.

EL PAPA FRANCISCO EXPLICA QUE EL DINERO, LA VANIDAD Y LAS HABLADURÍAS DIVIDEN A TODA COMUNIDAD


El Papa explica que el dinero, la vanidad y las habladurías dividen a toda comunidad
POR MERCEDES DE LA TORRE | ACI Prensa
 Foto: Vatican Media




En la Misa celebrada en la capilla de la Casa Santa Marta este martes 21 de abril, el Papa Francisco advirtió que “el dinero, la vanidad y las habladurías” son tres cuestiones que dividen a las comunidades y a las familias.

“Muchas veces, en la historia de la Iglesia, donde hay desviaciones doctrinales - no siempre, sin embargo, muchas veces - hay dinero detrás: dinero del poder, tanto el poder político como el dinero en efectivo, pero es dinero. El dinero divide a la comunidad. Por esta razón, la pobreza es la madre de la comunidad, la pobreza es el muro que protege a la comunidad”, afirmó el Papa.

En esta línea, el Papa afirmó que “el dinero divide, el interés propio” y añadió que esto sucede “incluso en las familias: ¿cuántas familias terminaron divididas por una herencia? ¿Cuántas familias? Y ya no se hablaban... Cuántas familias... Una herencia... Se dividen: el dinero divide”.

En su homilía, el Pontífice subrayó que “nacer de lo alto es nacer con la fuerza del Espíritu Santo. Nosotros no podemos tomar el Espíritu Santo para nosotros, solamente podemos dejar que nos transforme. Y nuestra docilidad abre la puerta al Espíritu Santo: es Él quien hace el cambio, la transformación, este renacer de lo alto. Es la promesa de Jesús de enviar el Espíritu Santo. El Espíritu Santo es capaz de hacer maravillas, cosas que ni siquiera podemos pensar”.

En este sentido, el Papa Francisco puso un ejemplo de comunidad cristiana “que no es una fantasía, esto es lo que nos dicen aquí: es un modelo, donde se puede llegar cuando hay docilidad y dejar que el Espíritu Santo entre y nos transforme” que parecería “una comunidad, digamos, ideal”.

Por ello, el Pontífice reconoció que “inmediatamente después de esto comenzarían los problemas, pero el Señor nos muestra hasta dónde podemos llegar si estamos abiertos al Espíritu Santo, si somos dóciles. En esta comunidad hay armonía”.


Asimismo, el Papa Francisco aseguró que “el Espíritu Santo es el maestro de la armonía, es capaz de hacerlo y lo ha hecho aquí. Debe hacerlo en nuestros corazones, debe cambiar muchas cosas de nosotros, pero debe hacer armonía: porque Él mismo es la armonía. También la armonía entre el Padre y el Hijo: es el amor de la armonía, Él. Y Él, con armonía, crea estas cosas como esta comunidad armoniosa”.

Al reflexionar en el pasaje del Libro de los Hechos de los Apóstoles (4:32-37) el Santo Padre destacó que se relatan los “muchos problemas en la comunidad” y añadió que “este es un modelo”. “El Señor ha permitido que este modelo de una comunidad casi ‘celestial’ nos muestre a dónde debemos llegar”.

Sin embargo, el Pontífice describió que, entonces, en las primeras comunidades cristianas “comenzaron las divisiones en la comunidad”. Y mencionó una carta del apóstol Santiago en donde aconsejaba que su fe “sea inmune al favoritismo personal”.

Por ello, el Papa Francisco pidió una vez más a “no discriminar” porque “los apóstoles deben salir y amonestar” y San Pablo en la primera Carta a los Corintios (1 Cor, 11) se quejaba de las divisiones entre ellos.

“Empiezan las divisiones internas en las comunidades. Este ‘ideal’ debe ser alcanzado, pero no es fácil: hay muchas cosas que dividen a una comunidad, ya sea una parroquia cristiana o una comunidad diocesana o presbiteral o de religiosos o religiosas... muchas cosas entran para dividir a la comunidad”, advirtió el Papa.

Dinero, vanidad, habladurías
En esta línea, el Santo Padre alertó sobre tres aspectos que dividen a las comunidades cristianas, incluso a las familias son: el dinero, la vanidad y las habladurías.

Sobre el dinero, Francisco destacó el prestar atención porque “si en su iglesia, en su asamblea, entra un hombre con un anillo de oro, lo ponen inmediatamente adelante, y el pobre queda al margen… y agregó que el mismo San Pablo escribió que “los ricos traen comida y comen, ellos, y los pobres, de pie", los dejamos allí como para decirles: ‘Arréglate como puedas’. El dinero divide, el amor al dinero divide la comunidad, divide la Iglesia”.

“Muchas veces, en la historia de la Iglesia, donde hay desviaciones doctrinales - no siempre, sin embargo, muchas veces - hay dinero detrás: dinero del poder, tanto el poder político como el dinero en efectivo, pero es dinero. El dinero divide a la comunidad. Por esta razón, la pobreza es la madre de la comunidad, la pobreza es el muro que protege a la comunidad. El dinero divide, el interés propio. Incluso en las familias: ¿cuántas familias terminaron divididas por una herencia? ¿Cuántas familias? Y ya no se hablaban... Cuántas familias... Una herencia... Se dividen: el dinero divide”, exclamó el Papa.

Al referirse a la vanidad, a “ese deseo de sentirse mejor que los demás”, el Santo Padre recordó la oración del fariseo relatada en el Evangelio: "gracias, Señor, porque no soy como los demás" y subrayó que “la vanidad divide, porque la vanidad te lleva a ser un ‘pavo real’ y donde hay un ‘pavo real’, hay división, siempre”.

Finalmente, el Pontífice indicó que las habladurías dividen a la comunidad de creyentes, y que a pesar de que no es la primera vez que lo dice, “pero es la realidad”. Porque las habladurías son eso “que el diablo coloca” en cada uno, “como una necesidad de hablar de los demás” y puso un ejemplo, cuando alguien dice: “qué buena persona es esa...  Sí, sí, pero, pero..." para advertir: que “inmediatamente el ‘pero’, que es una piedra para descalificar al otro e inmediatamente algo que escucho decir y así disminuyo un poco al otro”.

Sin embargo, el Papa Francisco reiteró que “el Espíritu siempre viene con su Fuerza para salvarnos de esta mundanidad del dinero, la vanidad y las habladurías, porque el Espíritu Santo no es el mundo: está contra el mundo. Es capaz de hacer estos milagros, estas grandes cosas”.

“Pidamos al Señor esta docilidad al Espíritu para que nos transforme y transforme nuestras comunidades, nuestras comunidades parroquiales, diocesanas, religiosas: las transforme, para que podamos avanzar siempre en la armonía que Jesús quiere para la comunidad cristiana”, concluyó.

Lectura comentada por el Papa Francisco:
Hechos 4:32-37


32 La multitud de los creyentes no tenía sino un solo corazón y una sola alma. Nadie llamaba suyos a sus bienes, sino que todo era en común entre ellos. 33Los apóstoles daban testimonio con gran poder de la resurrección del Señor Jesús. Y gozaban todos de gran simpatía. 34No había entre ellos ningún necesitado, porque todos los que poseían campos o casas los vendían, traían el importe de la venta, 35 y lo ponían a los pies de los apóstoles, y se repartía a cada uno según su necesidad. 36 José, llamado por los apóstoles Bernabé (que significa: «hijo de la exhortación»), levita y originario de Chipre, 37 tenía un campo; lo vendió, trajo el dinero y lo puso a los pies de los apóstoles.

LECTURAS BÍBLICAS DE HOY MARTES 21 DE ABRIL DE 2020


Lecturas de hoy Martes de la 2ª semana de Pascua
Hoy, martes, 21 de abril de 2020



Primera lectura
Lectura del libro de los Hechos de los apóstoles (4,32-37):

EL grupo de los creyentes tenía un solo corazón y una sola alma: nadie llamaba suyo propio nada de lo que tenía, pues lo poseían todo en común.
Los apóstoles daban testimonio de la resurrección del Señor Jesús con mucho valor. Y se los miraba a todos con mucho agrado. Entre ellos no había necesitados, pues los que poseían tierras o casas las vendían, traían el dinero de lo vendido y lo ponían a los pies de los apóstoles; luego se distribuía a cada uno según lo que necesitaba.
José, a quien los apóstoles apellidaron Bernabé, que significa hijo de la consolación, que era levita y natural de Chipre, tenía un campo y lo vendió; llevó el dinero y lo puso a los pies de los apóstoles.

Palabra de Dios


Salmo
Sal 92,1ab.1c-2.5

R/. El Señor reina, vestido de majestad

El Señor reina, vestido de majestad;
el Señor, vestido y ceñido de poder. R/.

Así está firme el orbe y no vacila.
Tu trono está firme desde siempre,
y tú eres eterno. R/.

Tus mandatos son fieles y seguros;
la santidad es el adorno de tu casa,
Señor, por días sin término. R/.



Evangelio de hoy
Lectura del santo evangelio según san Juan (3,5a.7b-15):

EN aquel tiempo, dijo Jesús a Nicodemo:
«Tenéis que nacer de nuevo; el viento sopla donde quiere y oyes su ruido, pero no sabes de dónde viene ni adónde va. Así es todo el que ha nacido del Espíritu».
Nicodemo le preguntó:
«¿Cómo puede suceder eso?».
Le contestó Jesús:
«¿Tú eres maestro en Israel, y no lo entiendes? En verdad, en verdad te digo: hablamos de lo que sabemos y damos testimonio de lo que hemos visto, pero no recibís nuestro testimonio. Si os hablo de las cosas terrenas y no me creéis, ¿cómo creeréis si os hablo de las cosas celestiales? Nadie ha subido al cielo sino el que bajó del cielo, el Hijo del hombre.
Lo mismo que Moisés elevó la serpiente en el desierto, así tiene que ser elevado el Hijo del hombre, para que todo el que cree en él tenga vida eterna».

Palabra del Señor





Comentario al Evangelio de hoy martes, 21 de abril de 2020
Eguione Nogeira, Misionero Claretiano


¡Queridos hermanos!

El Evangelio sigue con el dialogo de Jesús con Nicodemo. Hoy nos presenta el tema del nacimiento de lo alto. En el fondo se presenta la necesidad del hombre en participar de las realidades espirituales por medio de la fe.

Para “nacer de lo alto” hace falta una transformación interior del ser humano, abierto a la transcendencia. Esta apertura no significa agotar el conocimiento sobre Dios, sino dejarse empapar por la gracia divina, dejarse tocar por misericordia. Por eso, al utilizar la imagen del viento, Jesús quiere decir que las realidades celestiales permanecen siendo misterio, por lo que no se explican con criterios humanos. Esto se refuerza con la expresión “nadie ha subido al cielo, sino el que bajó del cielo, el Hijo del hombre” (Jn 3,13).

Jesús es el único y verdadero revelador de Dios y lo hace desde su experiencia inmediata con el Padre y en la cruz, signo de contradicción. La cruz se presenta como el lugar por excelencia de la revelación divina, del amor extremo. ¿Pero, cómo comprender esto? La serpiente puesta en un mástil en el desierto (Nm 21,4-9) sirve como una imagen pedagógica para comprender este misterio. Ella prefiguraba la crucifixión del Mesías, pues de maldición pasa a ser instrumento de sanación para el pueblo de Israel. Del mismo modo la cruz, instrumento de condenación y muerte, en Jesús se transforma en símbolo de salvación. Lo que queda evidente es que el amor y el dolor extremos se encuentran en la experiencia del Mesías crucificado.

Muchas personas buscan explicaciones religiosas para lo que estamos viviendo en estos momentos de pandemia y en otras situaciones en las que nuestra vida se encuentra en peligro. Decir que es un castigo de Dios, no es una respuesta que encuentra fundamentación en la revelación que Jesús nos ofrece. Pero, desde esta experiencia que estamos viviendo en todo el mundo, tenemos la oportunidad en hacer una profunda experiencia de encuentro con Dios, pues allí donde el dolor humano se hace fuerte, con más intensidad, el amor y la misericordia de Dios se hacen presentes.

Vuestro hermano en la fe,

Eguione Nogueira, cmf

FELIZ MARTES!!!





Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...